A seis meses de su aprobación la Ciudad, aun no se implementó la Ley Micaela

En octubre de 2019 la Legislatura porteña sancionó la adhesión a la Ley Micaela aprobada en 2018 por el Congreso de la Nación (Ley N° 6208). Medio año después, la Ciudad no dispuso aún ninguna reglamentación ni implementación de la mencionada norma.

La norma establece la capacitación obligatoria para los tres poderes del Estado en la temática de género y violencia contra las mujeres.  En un contexto de coyuntura política y social más que adversa en relación a la violencia contra las mujeres, el avance en la materia se hace más que imperioso.

En ese sentido, el pasado 5 de Marzo en la primera sesión ordinaria de la Legislatura Porteña, la legisladora Ofelia Fernández (Frente de Todos), presentó dos proyectos en relación a la Ley Micaela. Por un lado, se busca acelerar la reglamentación e implementación por parte del Poder Ejecutivo y el Poder Judicial de la norma, exigiendo que la aplicación sea tanto para todos los trabajadores de la Ciudad como también para las juntas comunales. Por otro lado, solicita al Poder Ejecutivo un informe con los motivos por los cuales todavía no fue reglamentada, estableciendo un calendario de capacitaciones, detalle del personal a cargo de brindarlas y el material que se utilizará. También se solicita un órgano en la Ciudad de Buenos Aires que haga un seguimiento y evaluación de las capacitaciones, tal como publicó Hamartia.

Durante la sesión del 5 de marzo, la legisladora de FDT expuso la situación actual de las mujeres en duras palabras: “La realidad no cambia, pesa de la misma manera, duele de la misma manera y hoy nos duele especialmente porque hace unos días estrangularon y quemaron en una parrilla a Micaela ¿ Saben que no ayudó? El empobrecimiento desmedido de nuestro pueblo que es, por supuesto, sobre todo un cachetazo a las mujeres, que en la Argentina cobran el 25% menos por el mismo trabajo”.

Y agregó: “No ayudó el ajuste al presupuesto habilitado para combatir la violencia que se lleva a las nuestras, no ayudó el cierre de refugios, ni del ellas hacen y la lista sigue. La deuda es con nosotras. Hay que establecer al feminismo como un trazo indiscutible de toda política pública. Hay que ampliar y restituir derechos. Nosotras hace rato llegamos a esa conclusión y no puede la política tardar tanto en alcanzarnos porque se nos va la vida en el camino. Marzo lleva más femicidios que días”.