Dirigentes clave de Cambiemos analizaron posibles escenarios electorales, con hipotéticas candidaturas de la ex presidenta, Carrió, Massa, Randazzo y otros.
Cristina Kirchner. Sergio Massa. Elisa Carrió. Florencio Randazzo. Julián Domínguez. Como incógnitas, esos fueron nombres que más se repitieron ayer en el almuerzo que compartieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña; gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, protagonistas de una mesa que sólo admitió a tres comensales más: secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, jefe de ministros bonaerense, Federico Salvai, y vicejefe porteño, Diego Santilli.
Se juntaron para analizar «escenarios electorales», y esa fue -en sí misma- otra novedad, ya que son palabras habitualmente silenciadas para el Gobierno y lógica comunicacional que sólo se permite hablar en público de la gestión.
La tercera novedad fue operativa: Peña ratificó la voluntad del presidente Mauricio Macri de «provincializar» decisiones del armado electoral en distritos gobernados por Cambiemos. Vidal y Rodríguez Larreta tendrán la última palabra cuando haya definiciones políticas en sus territorios, lo mismo que gobernadores radicales Alfredo Cornejo, Mendoza; Gerardo Morales, Jujuy; y Ricardo Colombi, Corrientes. Sin embargo, en la Casa Rosada insisten en que no quiere decir que el Presidente deje de tener injerencia.
La lógica se ampliará a municipios con intendentes de Cambiemos: cada jefe comunal tendrá voz y voto final al confeccionar listas de candidatos para próximos comicios.
Donde existan tensiones irreconciliables y distritos que gobierna la oposición crecerá el rol de Peña y ministro del Interior, Rogelio Frigerio, como integrantes de una mesa nacional de Cambiemos que tendrá sillas para UCR y Coalición Cívica.
Así, en Casa Rosada destacaban tres resultados centrales del almuerzo. Reforzar vínculo y trabajo conjunto entre Nación, provincia y Ciudad fue el primero. Darse organización para afianzar el armado nacional de Pro y estructura de Cambiemos en todo el país, otros dos.
Optimismo y dudas
«Nos enfocamos más en nuestra propia organización que mirar cómo están parados los demás», señaló otro comensal, pero admitió lo que señaló el resto: se habló mucho de los demás y, en general, de dudas que generan la decisión que tomen referentes de otros partidos y cómo alterarían el escenario electoral de este año.
La ex presidenta encabeza esas incógnitas. «Escenarios posibles hay miles, pero si Cristina Kirchner es candidata o no define el escenario principal y modificaría nuestra apuesta», indicó uno; para completar: «Falta mucho, pero si juega Cristina, el escenario de polarización se repetirá y nos será favorable. Si no se presenta, habrá fragmentación de partidos, pero también ahí somos optimistas».
Dos de los consultados negaron que un escenario de tercios depare una sorpresa desagradable a Cambiemos. ¿Por qué? Massa cayó en encuestas luego de la votación del impuesto a ganancias. «Cada vez que busca un golpe de efecto se kirchneriza y lo perjudica», resumió uno.
Pero, después del «factor» Cristina, Massa no fue la segunda incógnita en la mesa de San Telmo. Fue Lilita Carrió. Seis comensales desconocen aún si la líder de la Coalición Cívica se postulará por la Ciudad o provincia. Saben que se definirá cuando termine el verano, lo hablará directamente con Macri y prometió actuar como más «contribuya a Cambiemos».
«Mientras no defina, fortaleremos candidatos de Pro», señaló uno de los presentes, aludiendo a postulaciones del intendente de Vicente López, Jorge Macri; neurocientífico (radical) Facundo Manes; y ex diputada Gladys González.
Que el ex ministro de Transporte Florencio Randazzo sea mencionado como otra incógnita del tablero bonaerense no sorprende. Su postulación es uno de los deseos del tándem Vidal-Salvai. Pero, llamó la atención que Julián Domínguez sea mencionado en charlas de Pro. «A diferencia de Randazzo, lo vemos decidido a jugar», sentenció la fuente.