La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió que las fallas o errores de los gobiernos populares se «magnifican y exacerban para irritar e indignar», mientras en el pasado se ocultó «descarada y ostensiblemente la entrega de un país y el endeudamiento sin límites».
«El poder no se cuestiona a sí mismo», sino «al pueblo en sus errores», reafirmó la ex presidenta durante un acto en la ciudad bonaerense de Avellaneda junto al presidente Alberto Fernández.
«Todos aquellos dirigentes que militan, que organizan, que bajan al territorio, que meten los pies en el barro son de la política que salva la política y que no necesitan, como sí los arribistas o los oportunistas, de la operación de prensa, del momento para contestar la política; no necesitamos de la operación de prensa, somos militantes, tenemos representación y eso es lo que enaltece y lo que convoca a la política», expresó.
La vicepresidenta se pronunció así durante un acto que encabezó el Presidente en el barrio Isla Maciel del municipio bonaerense de Avellaneda, donde se entregó la vivienda número 20.000 de su gestión de Gobierno.
Fernández de Kirchner se refirió a los cuestionamientos que el jefe de Estado recibió de parte de la oposición en los últimos días por su aparición en una foto de la cena de cumpleaños de la primera dama, Fabiola Yañez, en julio del 2020, durante los primeros meses de la pandemia de coronavirus.
«Necesitamos imperiosamente otra forma de vincularnos, por eso Alberto te pido que no te enojes ni te pongas nervioso porque cuando uno es Presidente los errores, las fallas, las equivocaciones se magnifican en el caso de los Gobiernos populares y se exacerban para irritar, indignar, mientas se ha ocultado descarada y ostensiblemente la entrega de un país y el endeudamiento sin límites», reflexionó.
Como ejemplo, la vicepresidente graficó: «Si una hermana mía hubiera blanqueado 35 millones de dólares yo no estaría hoy acá; si mi hermana hubiera dicho ´Cristina es una hipócrita y tiene cuentas en el exterior´ hubiera sido repetido hasta el cansancio y hubiera sido un inmenso escándalo».
«Nada de eso ocurre», advirtió Fernández de Kirchner, al referirse -aunque sin nombrarlo- a Mariano Macri, hermano y denunciante de irregularidades cometidas por el expresidente Mauricio Macri.
«El poder no se cuestiona a sí mismo, el poder siempre cuestiona al pueblo en sus errores», planteó Cristina y agregó: «Por eso me gustó el tuit de La Cámpora, el de la cena del endeudamiento. Fue una cena de 45 mil millones de dólares», en alusión a la foto posteada en la red social Twitter, que muestra a la cúpula de Cambiemos con la entonces directora del FMI, Christine Lagarde en la Residencia de Olivos.
Dirigiéndose al Presidente, Cristina recordó: «Aquel 10 de diciembre (del 2019) te advertí lo que iba a pasar. Por eso Alberto, tranquilo. Poné orden donde tengas que poner orden, no te pongas nervioso, no te enojes y metele para adelante».
Además, en su mensaje, la Vicepresidenta se preguntó «dónde estaban los que hoy hablan de la República cuando se perseguía y se encarcelaba opositores sin juicio».
«¿De qué República nos hablan los que integraban mesas judiciales?», insistió Cristina y contrastó el hecho de que, en cambio, «ninguno» de los exfuncionarios de su Gobierno «se fue del país» cuando tuvieron que enfrentar los procesos judiciales durante la gestión de Cambiemos.
«Todos pusimos la cara y el cuerpo… Y nos vienen hablar de República; República de morondanga era eso», enfatizó Cristina.