«De Trafalgar a la Patagonia: La Antártida en peligro» por Miguel Ángel De Renzis
La Patagonia argentina ocupa 930.638 km2. Limita al norte y centro con Cuyo, al este con la Provincia de Buenos Aires y el Océano Atlántico, al Oeste con Chile.
El portugués Fernando de Magallanes, al frente de la expedición española, llegó a lo que hoy es Puerto San Julian, y nombró a los nativos “patagones”, por su tamaño, y al lugar, “Patagonia”
Ese territorio es codiciado desde siempre por los ingleses.
Al cumplirse el viernes un aniversario de la batalla de Trafalgar donde los españoles y franceses fueron derrotados por los piratas de Nelson, es menester entender que a partir de esa victoria Inglaterra se adueñó de los mares.
Desde allí pretendió heredar al imperio español en cuyos dominios nunca se ponía el sol, por la vastedad de los territorios de Europa y América.
Aprovechando los movimientos libertarios e independentistas de América ofrecía armas a los patriotas a través de las logias masónicas que fueron utilizadas para esconder la intención del reino pirata.
Salvo San Martin (por más que la masonería argentina se fuerce en incluirlo) la mayoría de los libertadores entraron en las logias. SAN MARTIN NO LO HIZO.
Del lado chileno la masonería logró amplio desarrollo al punto tal que a Salvador Allende, miembro de las logias, lo derrotó otro masón, Pinochet.
Después del cruce de los Andes de las fuerzas patriotas los ingleses quedaron al descubierto que habían utilizado a los originarios araucanos para cruzar de este lado de la Cordillera y asaltar y asesinar a los nativos del lado argentino.
Los pueblos originarios argentinos están compuestos por guaraníes, querandíes, chaná-ninuanes, chana-timbues, charrúas, sanavirones, comechingones, michilengues, huarpes, pehuenches, puelches, picunches, ranqueles, pampas, boroganos, huilches también conocidos como manzaneros, tehuelches o patagones del norte, tehuelches o patagones del sur, onas, yaganes, todos estos andinos del lado argentino.
Del lado chileno habitaban los alacaluf, los noluches, los araucanos y los chilotas araucanos.
Estos del lado chilenos cruzaban a robarle a los nativos del lado argentino, y luego de producir un asesinato en masa de los jefes de las tribus de nuestro país, dejaron de llamarse araucanos para pasar a llamarse mapuches, para evitar la venganza de los originarios de nuestro lado.
Por lo tanto los mapuches son un invento británico, al punto tal que su sede está en Londres.
Hoy, manejado por la inteligencia del MI5 y MI6 inglés y con las complicidades de quienes creen defender derechos de un lado y de otro, han creado un estado de subversión en la búsqueda de la segregación de la Patagonia.
Ahora, esa misma inteligencia ha logrado que los civiles del sur argentino se armen para salir a buscar a los del RAM. A esto se le debe agregar la ligereza de la venta de tierras a extranjeros producida en nuestro sur, a ingleses, norteamericanos, chinos, italianos, belgas, franceses.
El mayor terrateniente es Benetton de Italia con 900.000 hectáreas. Y también están los ingleses, Familia Johnston-Julie (Gran Bretaña) 20.000 hectáreas, y Joseph Lewis (Gran Bretaña) 38.000 hectáreas.
Mientras tanto los argentinos somos entretenidos con debates estériles y guardamos silencio ante el convenio de los israelitas con los ocupantes de Malvinas para llevarse el petróleo. O los gallegos que tienen permiso de pesca de los ingleses y se roban millones de dólares del Mar Argentino.
Sí. Nosotros discutimos el agujero del mate. Mientras el embajador yanqui marca con banderitas nuestro mapa para saber dónde está el gas o el litio.
Aunque nos parezca insólito, están dando los primeros pasos para, disfrazada de protesta por la tierra, comience la lucha armada por la Patagonia.
Especial para NCN por Miguel Ángel De Renzis