Derecho a Réplica| Escribe el Coronel Aliberto Rodrigáñez Riccheri
En Noviembre 2021, en NCN publicamos una nota que se titulaba “Un mismo hombre. Dos Historias. Un final curioso”.
Allí se mencionaba al teniente Aliberto Rodrigáñez Ricchieri, descendiente de un granadero que cruzó los Andes y del ministro de Guerra de Julio A. Roca.
En un Derecho a Réplica, publicaremos a continuación una carta que el Sr. Ricchieri envió a esta redacción para dejar su postura respecto a algunos de los temas mencionados en la crónica.
Leyendo la nota en la publicación NCN Noticias Congreso Nacional, veo que se ignora que además de participar por el fallecimiento de la Sra. Alicia Hartridge de Videla, hice publicar el día 18 de junio en el mismo diario un Recordatorio al conmemorarse el 9no. Aniversario de la muerte del Tte.Grl. Jorge Rafael Videla.
Con la misma curiosidad que manifiesta trataría de explicarme porque la misma persona con las virtudes que le atribuye, rinde homenaje a quien, cuando la subversión asolaba la República con sus métodos auténticamente terroristas y quienes debían aportar soluciones confesaban que no las tenían, asumió con patriotismo esa histórica responsabilidad, ante la ausencia cobarde de quienes más tarde ejercitarían la crítica desde sus asépticos escritorios, con la íntima convicción que ante un mal excepcional solo cabían proporcionales respuestas, después de haber fracasado otros métodos más ortodoxos. El mismo creador del “movimiento”, a la hora de verse amenazado por la subversión, no ordenó la derrota o la neutralización del enemigo, sino el aniquilamiento, sabiendo que hay enfermedades que se curan con reposo y otras que exigen cirugía.
Y con referencia específica al Tte. Grl Videla, no me cabe la menor duda de que el campo de batalla no es la única forma de morir por la Patria, habida cuenta de la cantidad de hombres que en parecidas circunstancias, dieron por ella su libertad y su vida.
Advierto también que por su edad, solo conoce por referencias la dramática época que debí vivir personalmente, y los reiterados pedidos de una sociedad aterrada pero de posterior desmemoria, pidiendo a las Fuerzas Armadas soluciones que el poder político no le daba.
Coronel Aliberto Rodrigáñez Riccheri