Diego Santilli en Londres
El presidente de la Legislatura porteña y vicejefe de Gobierno está en la ciudad europea, donde visitó la alcaldía y se reunió con un jefe policial para intercambiar experiencias sobre traspaso de efectivos.
El presidente de la Legislatura y vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, está en un viaje oficial a Londres, acompañado por el legislador Agustín Forchieri. Como una de sus actividades en la capital británica, estuvo en la sede del monitoreo de cámaras de seguridad del Scotland Yard, donde fue recibido por Nicholas Nunney, máximo responsable del lugar y experto en terrorismo y seguridad.
También visitó la alcaldía londinense, donde se reunió con el jefe de estrategia de la policía local y se interiorizó sobre la experiencia del traspaso de efectivos. Asimismo, el martes recorrió el puerto londinense donde abordó la temática de limpieza del Támesis.
“Londres es la capital con más cámaras del mundo. Poseen un anillo de seguridad donde están los 64 edificios más emblemáticos de la ciudad y que pueden ser blanco de atentados terroristas. Es muy interesante ver cómo cruzan datos y trazan patrones de prevención”, explicó Santilli.
La capital inglesa es una de las ciudades más seguras del mundo, pese a ser uno de los máximos objetivos del terrorismo y recibir múltiples amenazas. En ella, como Buenos Aires, hubo traspaso de efectivos federales a la policía local, hace cinco años cuando 32 mil agentes pasaron a formar la seguridad londinense, quedando el mítico cuerpo del Scotland Yard a cargo de crímenes, narcotráfico y terrorismo.
“La experiencia londinense fue similar a lo que pasa en Buenos Aires hoy. Muchos sentían prejuicio y miedo al cambio, pero hoy están totalmente adaptados. La policía local es de cercanía y recuperó la relación de vecinos que incluso forman un consejo por comuna y se juntan periódicamente con comisarios para intercambiar información. Hoy, tras cinco años, tienen un sistema con alta aceptación y el delito bajó un 20 por ciento. Hay cosas para imitar y trasladar en nuestra ciudad”, señaló el vicejefe.
Por otro lado, Santilli contó que “en los años ‘50 el Támesis estaba como el Riachuelo. Luego algunas industrias comenzaron a mudarse y con legislación estricta lo sanearon. Lo más importante fue la fuerte campaña de concientización que lanzaron hace una década porque todavía se veían residuos de la ciudad como botellas, maderas y plásticos”.
A lo largo del Támesis, que cruza todo Londres, funcionan instalaciones para capturar basura. Además, el agua es monitoreada dos veces al mes por la autoridad portuaria y se incrementaron tasas para barcos que deciden navegarlo.
“Controlaron la contaminación del Támesis con reglas claras y concientización. Esto junto a la ayuda tecnológica para controlar, mantiene sano a uno de sus emblemas. La experiencia es totalmente aplicable al Riachuelo”, concluyó.