Diputado Torello criticó la baja participación de los productores en política
“Los productores agropecuarios se quejan por la presión impositiva y por las medidas anticampo del Gobierno, pero no participan en la vida política del país y tampoco destinan fondos para tener una representación profesional en el Congreso que los defienda”, dijo el diputado nacional Pablo Torello, de Juntos por el Cambio, en una reunión virtual organizada por la consultora AZ- Group.
“Históricamente, el sector agropecuario estuvo muy encerrado tranqueras adentro; los productores se ocupan de sus empresas y no destinan tiempo que hacer conocer su esfuerzo a los políticos y a la opinión pública. Así, en la Cámara de Diputados, sólo cinco bancas están ocupadas por representantes vinculados al agro sobre un total de 257”, comparó el legislador nacional.
A su vez, Torello agregó: “Los productores tampoco están dispuestos a destinar recursos para mostrar la realidad de sus empresas y para generar acciones de defensa y de lobby, como hacen otros sectores de la agroindustria”.
“Esa actitud displicente es un mal negocio, si se considera lo que dejan de percibir por retenciones, diferencial cambiario etc., y se compara con lo que debería aportar cada uno”, fustigó Torello.
- “No están dispuestos a poner plata en la política, a pesar de que el país es manejado por los políticos; los productores se encierran en una cueva y no toman la iniciativa para dar pelea por la defensa sectorial”, insistió el diputado nacional.
¿Cómo se podría motivar la participación de los productores en los asuntos públicos? se le preguntó al diputado Torello.
“Es una decisión individual; cada uno debe pensar si asume o no esa responsabilidad”, contestó. “Pero si no puede asumirla por edad u otro motivo, podría aportar recursos, junto con otros, para que un profesional ocupe su lugar”, dijo.
Y agregó: “En la práctica, la preocupación de los productores por las medidas gubernamentales no va más allá de enviar o recibir WhatsApps o de hacer conversaciones quejosas entre conocidos”.
Este comportamiento pasivo contrasta con el que tienen otros sectores de la agroindustria, como carnes, cereales y oleaginosas, que han contratados lobistas profesionales para lograr sus objetivos, según indicó.
“La representación está hecha por productores integrantes de las gremiales agropecuarias, que deben ocuparse de sus empresas diariamente y, en el tiempo restante, ver qué pueden hacer con los temas de sus representados trabajando siempre a pulmón”, finalizó.