El expresidente, Eduardo Duhalde, se defendió del escándalo de la vacunación VIP. El exmandatario fue inoculado, al igual que “Chiche” Duhalde y sus hijas en el momento que se conoció la polémica aplicación de dosis contra el coronavirus a políticos y allegados a Ginés González García y otros funcionarios del Gobierno.
“En diciembre me preguntaron si me quería dar la vacuna. Le dije a Ginés que no sé si convenía. Él me dijo que sí y me contó que me iba a dar la vacuna cuando se la aplicaba Cristina. También tenían una para Menem”, detalló.
“No me arrepiento, para nada”, afirmó Duhalde, en diálogo con Súper Mitre. “Era un contexto de antivacunas y me contaron que habían hablado con ex presidentes. Esas cosas había que hacerlas, lo hizo Estados Unidos con sus expresidentes”, planteó y agregó: “Hice lo que me dictó la conciencia que era lo correcto”.
“No recibimos la segunda dosis. La estamos esperando”, aclaró.
Por otra parte, hizo alusión al presente político del país. Al respecto, dijo que el presidente Alberto Fernández “no está bien”.
“El presidente no está bien. Es imposible soportar 15 impactos psíquicos y estar bien. El presidente no lo entiende. No está para definir cosas. Quizás el viaje a Europa le haga bien y se recupere”, indicó.
“No fue jefe de Gabinete de Néstor Kirchner, era secretario privado. Néstor decidía todo. Paga una inexperiencia de gestión”, recalcó el referente justicialista.
Para Duhalde, “es imperiosa la unidad de los argentinos”. “No veo otra salida. Nos vivimos peleando como estúpidos. Es absurdo”, reparó.
En tanto, sostuvo: “Estamos en la crisis más compleja. El presidencialismo es un fracaso rotundo. Hubo una unión de dos dirigentes que piensan diametralmente opuestos como Cristina Kirchner y Sergio Massa. Nadie me va a convencer de lo contrario. Massa no tiene una tendencia de llevar a la Argentina hacia la izquierda”.
A su vez, manifestó que “Alberto nunca tuvo un partido” y que “no hay una coalición” de Gobierno. “Las cosas así no pueden marchar, hay que unirnos. Hay que dejarnos de embromar. Hay que hacer una coalición de 15 a 20 años. Sé que es difícil, pero hay que lograrlo”, concluyó.