Educación| Los números del presupuesto no concuerdan con el discurso del PRO
El ex presidente Mauricio Macri se refirió al tema de la presencialidad de clases y felicitó “A los padres que se organizaron para mantener la educación y a la Justicia que actuó en defensa de la Constitución de la Ciudad e hizo cumplir la ley como corresponde”.
Quiero felicitar también al Gobierno de la Ciudad que, con datos científicos y decisión, defendió la educación.
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) April 19, 2021
A través de la red social del pajarito azul sostuvo hizo extensivo el saludo al “Gobierno de la Ciudad que, con datos científicos y decisión, defendió la educación”.
Finalmente sostuvo que “Al mismo tiempo, no puedo dejar de lamentar la actitud y los exabruptos de las autoridades de la Provincia de Buenos Aires y la de los gremios docentes que hacen un uso político de la situación y actúan en contra de los alumnos por los que dicen trabajar”.
Lo paradójico del asunto es que, quien ahora levanta la bandera de la educación, mientras fue Presidente redujo el presupuesto de la cartera un 35 por ciento.
Este dato deriva de un relevamiento realizado por un colectivo de observatorios y equipos de investigación de las universidades UNIPE, la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, el Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini y las universidades de Avellaneda, Quilmes, Tres de Febrero, General Samiento y San Martín.
El mismo refleja que, en términos generales, entre 2016 y 2019 la gestión de Cambiemos ajustó más en los niveles no universitarios que en los universitarios y desatendió especialmente las políticas socioeducativas destinadas a enfrentar la desigualdad.
La reducción de los fondos se produjo mediante dos procesos. El primero fue la decisión política de ajustar el gasto público; el segundo, la reducción del Producto Bruto Interno. Ambos procesos achicaron la torta de recursos de la que surge la porción que se asigna para educación.
Una de las principales características de la gestión de Cambiemos fue el abandono de las políticas educativas en los niveles no universitarios. Especialmente de las medidas que buscaban atender las desigualdades, generando oportunidades de formación para los estudiantes de los sectores sociales con menor capacidad económica.
CABA no se queda atras
Por su parte algo similar sucede en la Ciudad, ya el el 17,18% asignado a Educación en el Presupuesto 2021 es el más bajo en todos los años de gobierno PRO. De hecho, la partida viene perdiendo participación en el total presupuestario ininterrumpidamente desde hace una década.
Cuando Macri asumió la Jefatura de Gobierno en 2007, el porcentaje del presupuesto asignado a la educación rondaba el 30%. En 2011, al término de su primer mandato, la partida representaba un 27% del total. La “herencia M” que Larreta tuvo que aceptar cuando accedió a su primer mandato a fines de 2015, fue un presupuesto con solo un 22% destinado a Educación. Progresivamente ese porcentaje se fue reduciendo año a año hasta llegar a este 2021, en el cual la fuerza política porteña hizo de la educación su principal bandera de confrontación con el Gobierno Nacional, al mismo tiempo que redujo los recursos destinados a esa partida en su distrito madre a su mínimo histórico.
El aumento nominal para este 2021, año en que debía recuperarse en términos educativos el costoso proceso de confinamiento 2020, fue de casi 22 mil millones de pesos más que el año pasado. Esto representó un 26,9% de aumento con respecto al presupuesto 2020, que cruzado con el 29% de inflación proyectada por el propio Gobierno de la CABA arroja un recorte en términos reales de 2,1%.