El Gobierno oficializó el llamado a sesiones en el Congreso
El presidente Javier Milei cumplió con su promesa de aplicar medidas de shock y en las primeras dos semanas de su gobierno no se demoró en hacerlas: publicó un DNU con la derogación de 300 leyes y envió un paquete de medidas clave para su gestión. La intención del Ejecutivo es ir a fondo en los primeros días, mientras mantiene un alto respaldo popular.
En este sentido, Milei convocó a sesiones extraordinarias en el Congreso de la Nación entre el 26 de diciembre y el 31 de enero, por medio del decreto 76/2023 publicado en el Boletín Oficial. Se tratarán medidas como reformas del Estado, Boleta Única de Papel y la reforma del Impuesto a las Ganancias, entre otros. El decreto determina que a partir del 26 de diciembre el Congreso deberá integrar las diferentes comisiones tanto en Diputados como en el Senado, muchas de las cuales deberán darle dictamen a cada una de esas leyes que envió el Ejecutivo para tratar en extraordinarias.
En tanto, el decreto presidencial fue excluido del temario de 11 puntos a tratar, por lo que su abordaje en el parlamento podría demorarse. En concreto, el DNU no podrá votarse en el Congreso hasta el 1° de marzo, pese a que su tratamiento en la comisión bicameral de Trámite Legislativo pueda iniciarse por estos días. Ese ente tendrá la tarea de pronunciarse sobre la validez del DNU por lo que el oficialismo buscará demorar lo más posible el debate. Hasta tanto el Congreso -o el poder judicial- se expida, el decreto regirá desde el 29 de diciembre.
Al respecto, el jefe de bloque de La Libertad Avanza en la Cámara Diputados, Oscar Zago, manifestó que no habrá actividad en el recinto durante el transcurso de esta semana, ya que en ese tiempo se conformarán las comisiones que revisarán las medidas anunciadas por el Gobierno. Además, anticipó que el nuevo paquete de leyes del Ejecutivo será enviado entre el martes y miércoles, con intenciones de discutirlo en enero en sesiones extraordinarias.
Respecto de la modificación en el régimen del impuesto a las Ganancias, se busca retrotraer la decisión por la cual pasaron a pagar el impuesto los trabajadores con salarios brutos en torno a los $2.000.000. De aprobarse, lo pagarían aquellos que tengan salarios brutos mensuales superiores a un monto alrededor de los $975.000.
Otra de las iniciativas incluidas en el temario implica un cambio en el sistema electoral a nivel nacional, donde se aspira a pasar del actual modelo de votación con las llamadas “listas sábanas” al modelo de Boleta Única de Papel (BUP), sistema que ya rige, por ejemplo, en la provincia de Santa Fe. Además, el paquete legislativo a ser tratado en extraordinarias también incluye la eliminación de la llamada “doble imposición” en materia impositiva para empresas de distintos países que operan en Argentina.
Además, se incluye el pedido de autorización al Congreso para que Milei pueda ausentarse del país durante el año próximo, cuando lo imponga la agenda de Gobierno. El Presidente tiene previsto un primer viaje para 2024, cuando visitará a mediados de enero el Foro de Davos, el encuentro de empresarios y políticos de todo el mundo que se realiza todos los años en esa localidad suiza.
Por qué se demora el tratamiento del DNU
El DNU de Milei fue publicado en el Boletín Oficial el jueves pasado y comenzará a regir 8 días más tarde, el 29 de diciembre. Según la Constitución, dentro de un plazo de 10 días desde su “dictado” debe ser puesto a consideración de la Bicameral de Trámite Legislativo, que tiene otros 10 días para emitir un dictamen sobre su validez o invalidez.
El dictamen debe ser tratado tanto en el recinto del Senado como en el de Diputados: solo si las dos cámaras lo rechazan, el DNU es derogado. Cualquier otro escenario supone que el decreto sigue rigiendo. Primero debe conformarse la bicameral, que como tal está integrado por legisladores de las dos cámaras: 8 senadores y 8 diputados. La mayoría para el quorum y para dictamen, vale aclarar, se consigue con 9 miembros. Se espera que quede conformada en los próximos días.
De los 8 senadores: 1 será de La Libertad Avanza (Juan Carlos Pagotto); 1 de la UCR (Victor Zimmermann); 1 del PRO (Luis Juez); 1 de Cambio Federal (Juan Carlos Romero); 1 por Unidad Federal (Carlos Camau Espínola) y para Unión por la Patria quedarían 3. De los 8 diputados: 2 serán de LLA (Oscar Zago y Lisandro Almirón), 1 del PRO (Hernán Lombardi); 1 de la UCR (Francisco Monti); 1 Cambio Federal y aliados (Nicolás Massot) y 3 de UxP (no se habían informado los nombres). En ambas cámaras, Unión por la Patria reclama un lugar más del que fue acordado.
En resumen, del total de los 16 integrantes: UxP tendrá 6 miembros; LLA tendrá 3; los bloques federales que responden a gobernadores 3; el PRO 2 y la UCR 2. La Libertad Avanza, obviamente, y el PRO, pese a las fisuras internas, ya tiene decidido avalar el decreto. Unión por la Patria cuestionó de plano tanto el uso del DNU como su contenido; la UCR y los bloques federales, en cambio, cuestionaron muy duramente el instrumento, pero no tanto el contenido.
Es decir, con el peronismo K determinado a rechazarlo, una duda está hoy en qué podrían hacer los 2 radicales y los 3 federales. Y, según señalaron legisladores de los dos sectores, pese a las críticas públicas, será difícil eventualmente sumarse a una votación con el kirchnerismo para voltear una decisión del gobierno, a menos de un mes de su asunción y en un contexto delicado.