El Gobierno dará a conocer en los próximos días un decreto de necesidad y urgencia que incluye reformas en la estructura y el funcionamiento del Estado.
El gobierno trabaja desde hace meses en una reforma del derecho administrativo argentino de los últimos años, con el objeto de terminar con la burocracia y ajustar los mecanismos de contratación del Estado a parámetros de economías más modernas.
Los cambios incluyen cambio de funciones para determinadas carteras, enroques de secretarías de un ministerio al otro y recorte de estructuras ociosas. Las modificaciones se impondrían por un decreto de necesidad y urgencia (DNU), pero desde el oficialismo ya adelantaron al Congreso que no se trata de una reforma en sí misma, por lo cual no será necesaria la aprobación parlamentaria. A pesar de apelar al DNU, el Gobierno no puede eludir del todo al Congreso. El decreto debe ser tratado por la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo del parlamento y luego elevar su pronunciamiento al pleno.