El ministro de Justicia, Germán Garavano, aseguró que «Argentina es uno de los países con mayores niveles de impunidad del mundo», y afirmó que el Gobierno impulsará una reforma del Código Penal y la escala de condenas, además de los cambios propuestos en el régimen de responsabilidad juvenil, que incluye una baja de la edad de imputabilidad. “El Código quedó obsoleto y perdió todo sentido de la proporción”, resumió.
«Argentina es uno de los países con mayores niveles de impunidad de la región y del mundo», sostuvo. Consideró: «Hay jueces que trabajan mucho, que le ponen el esfuerzo (para una mejor administración de justicia), y hay otros que tienen a veces miradas muy alejadas del sentido común y de la realidad, donde solo ven al victimario y se olvidan de todo el daño social y de la víctima».
«Cuando uno hace un análisis sobre la cantidad de hechos delictivos que se cometen y las personas que están efectivamente condenadas, el número es menor al uno por ciento», añadió el ministro y denunció que durante el kirchnerismo hubo una visión «más cercana» al victimario que a la víctima.
El Gobierno pone el foco en el caso de la figura de «homicidio simple», que tiene una pena de prisión de 8 a 25 años. «Matar en la Argentina te puede valer, con buen comportamiento y saliendo con el beneficio de los dos tercios de la condena, seis años de cárcel nada más. Y, otro tribunal, puede disponer para el mismo hecho 25 años», establecen como un «desequilibrio» a corregir.
Asimismo advirtió hay inconvenientes “de orden político” ya que es “muy difícil remover por ahí a algún juez” debido a “cómo está integrado en número” el organismo, con “jueces o diputados o senadores del gobierno anterior, lo que hace que no se llegue con la cantidad de votos”.