El macrismo cerca de UNEN en la Legislatura porteña
La cúpula macrista en el Parlamento de la ciudad privilegia su vínculo con UNEN y se distancia de su «pacto de caballeros» con los representantes kirchneristas, interlocutores de comisiones y espacios legislativos.
Lanzado hacia la Presidencia, Macri necesitará una Legislatura más tranquila y, a la vez, diferenciar su gestión de la de la Casa Rosada. Así, el bloque K contiene hoy a más dirigentes camporistas: promesa segura de conflictividad, algunos legisladores creen que harán la revolución desde el edificio de Perú al 100.
Cristian Ritondo, vicepresidente primero; la titular del bloque, Carmen Polledo, y el legislador Martín Ocampo son los macristas que conversan por las 24 comisiones legislativas que trabajarán luego de la apertura de sesiones, que el jefe de gobierno inaugurará el viernes.
El reparto deja, como era de esperar, las principales comisiones en manos de Pro: Presupuesto quedaría a cargo de Alejandro García; Asuntos Constitucionales, para Helio Rebot; Justicia, para Francisco Quintana; Salud, para Raquel Herrero, y Educación, para Victoria Morales Gorleri. De ellos, los dos primeros están cerca de la senadora Gabriela Michetti; el tercero, del secretario de gobierno Marcos Peña, y la cuarta, de Daniel Angelici.
En Pro aseguran que el resto de las presidencias de las comisiones se otorgarán «de acuerdo con su representación legislativa». Además de 11 o 12 en total para el macrismo, habrá presidentes de UNEN, kirchnerismo y Confianza Pública, la fuerza liderada por Graciela Ocaña, convertida en el fiel de la balanza de próximas y reñidas votaciones. Vivienda (pedida por el kirchnerismo), Desarrollo Económico y Medio Ambiente (que podría ir para Proyecto Sur) son algunas de las comisiones importantes que quedarían en manos de la oposición porteña.
UNEN tendría más representantes en las comisiones destacadas que el kirchnerismo, hoy encabezado por la diputada Gabriela Alegre. Así, el macrismo se asegura interlocutores previsibles en las peleas más difíciles donde los moderados y razonables del kirchnerismo ahora son minoría.