El Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, expuso ante la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados y defendió la Ley de Fomento al Desarrollo Agroindustrial Federal, Inclusivo, Sustentable Y Exportador.
En ese marco, Domínguez aseguró que la ley de Fomento al Desarrollo Agroindustrial “es una propuesta que trabajó el sector privado, en acuerdo con el público” y que “está convencido que es el mejor instrumento para asumir un proceso de promoción de nuevas inversiones, de industrialización de la ruralidad y de generación de empleo para dar respuesta al principal interrogante que reclama el productor: reglas de previsibilidad”.
“El mejor mensaje que puede recibir hoy la Argentina, los productores y la industria del sector, es que construyamos consensos básicos y promociones para quienes decidan invertir en la Argentina”, sostuvo.
Sobre la ley de Fomento al Desarrollo Agroindustrial, Domínguez planteó también que “promueve el incremento de la inversión y del empleo”, con metas para poder exportar 100 mil millones de dólares y generar 290 mil puestos de empleo.
“Esta ley tiene todos los instrumentos necesarios para que, en un debate diverso, se pueda generar la carta de navegación para la década en uno de los sectores importantes y con mejores capacidades que tiene Argentina”, resumió.
El ministro de Agricultura además se refirió al Plan GanAr que genera mejores condiciones de productividad de la carne e informó que las primeras señales de su desarrollo “es que va aumentando el peso de faena en el mercado interno”.
Del mismo modo, el titular de la cartera agraria reconoció la institucionalización del sector rural y destacó el rol del SENASA, el INTA y las universidades para la producción alimentaria. “El cambio climático vino para quedarse y la respuesta viene, a nuestro entender, por la biotecnología y las empresas de conocimiento”, manifestó.
Durante su exposición ante los legisladores, Domínguez se refirió al contexto internacional y consideró que “nadie imaginaba que la guerra iba a traer las consecuencias que trajo”. “Estamos en un escenario donde lo que Argentina produce, el mundo lo reclama”, reflexionó.
A modo de cierre, el ministro de Agricultura dijo que “hay una oportunidad que pocas veces la historia nos ofrece a la Nación, acompañada por los precios internacionales de los commodities”.