El Senado afina detalles para modificar el proyecto de Boleta Única de Papel antes de su segunda revisión
Esta semana se espera una importante sesión en el Senado donde el oficialismo y la oposición dialoguista se preparan para afinar los detalles de las modificaciones al proyecto de Boleta Única de Papel (BUP), aprobado en 2022 por la Cámara de Diputados. El objetivo es devolver el proyecto a la Cámara baja lo más rápido posible, antes de que pierda estado parlamentario el último día de febrero próximo, y avanzar con una reforma electoral de relevancia que, en principio, adoptaría el modelo mendocino en lugar del cordobés.
Vale recordar que el sistema de Boleta Única de Papel, diseñado para simplificar el proceso electoral, fue objeto de intensas discusiones y ajustes. Tanto Mendoza como Córdoba han implementado modelos similares de votación, pero el esquema mendocino ha sido considerado como más adecuado debido a su mejor adaptabilidad. En el modelo mendocino, los cargos se presentan en el margen izquierdo de la papeleta de forma horizontal, mientras que los partidos o alianzas se listan en filas verticales. Esta disposición ha sido preferida sobre el sistema cordobés, que aunque similar, no ofrece la misma flexibilidad.
Asimismo, el senador Edgardo Kueider, presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales y representante del peronismo disidente de Entre Ríos, ha jugado un papel crucial en la redacción del texto final, basándose en los modelos impresos provistos por el Gobierno. La Casa Rosada siguió de cerca el proceso para garantizar que el acuerdo se concretara, después de varias complicaciones.
En tanto, para que la ley sea aprobada, el proyecto de BUP deberá ser modificado en la Cámara alta para excluir la opción de votar la lista completa en las PASO, una característica que se encuentra en los sistemas de Córdoba y Mendoza. Esta exclusión ha sido solicitada por Mónica Silva (Juntos Somos Río Negro) y por dos senadores renovadores misioneros, quienes son clave para asegurar el apoyo necesario. Dado que se trata de una cuestión electoral, la ley requiere mayoría absoluta en el Senado. En caso de empate, la vicepresidenta y titular de la Cámara alta, Victoria Villarruel, no puede dirimir la votación. Esta situación ha generado una parálisis desde febrero pasado, que ahora se intenta resolver con la ayuda de los senadores radicales Mariana Juri y Rodolfo Suarez, en sintonía con el gobernador mendocino Alfredo Cornejo.
Además de la BUP, el Senado se prepara para sancionar la ley que fortalecerá el presupuesto universitario, impulsada por casi toda la oposición. El dictamen sobre esta ley se firmará esta tarde, luego de que el kirchnerismo enviara a sus representantes a la comisión de Educación casi diez meses después de iniciado el debate. La presidencia de la comisión será asumida por el cristinista Eduardo De Pedro, aunque se prevé que el Gobierno podría vetar esta ley, al igual que hizo con el proyecto de mejora de jubilaciones.
Por su parte, otro tema que podría ser abordado en el Senado es el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) sobre millonarios fondos para la nueva Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE). Este DNU ya fue rechazado por Diputados, y ahora está en manos del Senado decidir su futuro, en una acción que podría ser histórica, ya que el Congreso no ha tomado una medida similar desde 2006, cuando se reglamentó la ley impulsada por Cristina Kirchner. Se espera que en las próximas horas se defina si la sesión se realizará en dos encuentros entre mañana y el jueves o si se concentrará en una sola reunión, siendo esta última opción la preferida por la mayoría.