El Senado dio media sanción al Proyecto de Ley de Etiquetado y Rotulado de Alimentos
Sobre el final de la jornada, en su Sesión Ordinaria, el Senado puso a consideración el llamado proyecto de Ley sobre Etiquetado de Alimentos. El mismo llegaba al recinto tras la unificación de quince iniciativas presentadas por legisladores de todas las bancadas y fue aprobado por 64 votos positivo y 3 negativos.
Una de las primeras oradadoras fue la senadora nacional Silvia Sapag, quien describió que «esta ley busca promover la prevención de la malnutrición y de enfermedades crónicas no transmisibles y evitables como la diabetes, las enfermedades coronarias, la obesidad y los accidentes cerebrovasculares».
Agregó además que “para tomar la determinación de llevar o no un comestible una persona demora seis segundos. Por eso el sello debe ser grande, se debe diferenciar del colorido del empaque, y con pocas palabras para que la información llegue directamente».
A su turno, la senadora nacional Silvina García Larraburu coincidió que «esta norma es fundamental para reducir las enfermedades crónicas y cardiovasculares. Este proyecto busca garantizar el derecho a la salud y a una alimentación adecuada brindando información nutricional simple y comprensible».
«Han habido 23 expositores desde distintas miradas y posiciones que dieron sus opiniones, además de las áreas de gobierno con competencia en el tema, como son salud, agricultura e industria. El etiquetado frontal de alimentos es una herramienta muy valiosa» destacó a su turno, el senador nacional Mario Fiad.
Una de las voces que se manifestó en contra fue la senadora por Tucumán, Silvia Elías de Pérez quien fue determinante en declarar que el proyecto “demoniza el azúcar y deja desamparada a su provincia”.
«El azúcar es un nutriente natural y orgánico, en este proyecto no se hace distinción entre el azúcar total y el azúcar agregado, entonces, cualquier producto con pocos gramos de azúcar llevará un sello de advertencia que diga que no lo consuman» sentenció.
Al momento de tener la palabra, la senadora nacional, Senadora Silvia Giacoppo, detalló que «Voy a votar con la conciencia de que estoy haciendo lo correcto y lo digo como jujeña representante de una zona productiva. No se ataca la producción azucarera, no se la está demonizada, se está otorgando el derecho al consumidor a saber qué come”.
Por su parte el senador nacional por Mendoza, Julio Cobos, sotuvo que «el objetivo de este proyecto es la promoción de la salud a través de una alimentación adecuada, que se logra advirtiendo a la población lo que va a consumir. No estamos demonizando, ni prohibiendo ningún producto».
«El sobrepeso y la obesidad tienen muchas causas no solo la alimentación, son nuestros hábitos, usos y consumos. Si consumimos calorías por de la mala alimentación pero no profundizamos en cómo las consumimos estamos debatiendo solo una parte del problema” argumentó a su turno Alberto Weretilneck, senador nacional por Río Negro.
Los Detalles del Proyecto
El Proyecto aprobado busca fijar las pautas sobre una alimentación saludable en la población Argentina al unificar quince iniciativas presentadas por legisladores de todas las bancadas.
Entre los puntos principales se destaca el “garantizar el derecho a la salud y a una alimentación adecuada a través de la promoción de una alimentación saludable, brindando información nutricional simple y comprensible de los alimentos envasados y bebidas analcohólicas”.
Advierte a consumidores sobre “los excesos de componentes como azúcares, sodio, grasas saturadas, grasas totales y calorías, a partir de información clara, oportuna y veraz”.
Promueve la “prevención de la malnutrición en la población y la reducción de enfermedades crónicas no transmisibles”.
Incluso obliga a «utilizar un sello que adoptará la forma de octógonos de color negro con borde y letras de color blanco en mayúsculas».
«Se prohíbe incluir personajes infantiles, animaciones, dibujos animados, celebridades, deportistas o mascotas, elementos interactivos, la entrega o promesa de entrega de obsequios, premios, regalos, accesorios, adhesivos, juegos, descargas digitales, o cualquier otro elemento, como así también la participación o promesa de participación en concursos, juegos, eventos deportivos, musicales, teatrales o culturales».
En este sentido, se destaca que el proyecto de ley está dirigido a “fabricantes, fraccionadores y envasadores que distribuyan, comercialicen o importen, que hayan puesto su marca o integren la cadena de comercialización de alimentos y bebidas analcohólicas de consumo humano, en todo el territorio de la República Argentina”.
“Los alimentos y bebidas alcohólicas envasados y comercializados en la Argentina en cuya composición final el contenido de nutrientes críticos y su valor energético exceda los valores establecidos deben incluir en la cara principal un sello de advertencia indeleble por cada nutriente crítico en exceso, según corresponda: «Exceso en azúcares», «Exceso en sodio», «Exceso en grasas saturadas», «Exceso en grasas totales», y/o «Exceso en calorías» detalla entre sus considerandos.
A su vez determina que, en caso de contener edulcorantes, el envase “debe contener una leyenda precautoria inmediatamente por debajo de los sellos de advertencia con la leyenda: «Contiene edulcorantes, no recomendable en niños/as»».
En ese sentido es interesante aclara que la Organización Mundial de la Salud recomienda que el consumo de estos azúcares añadidos sea menor que el 10% de la ingesta calórica total, mientras que una reducción de hasta el 5% podría incluso aportar beneficios para la salud, según señala el mismo organismo.
El Proyecto