Primeros números ponen por delante al sector que impulsa un frente amplio que integre a otras expresiones progresistas, encarnado en la candidatura de Daniel Filmus, que incluso desplaza a Martín Lousteau.
Daniel Filmus supera a demás postulantes antes de definir candidaturas
Cuando la competencia en Buenos Aires prometía acaparar reflectores de la marquesina electoral, de un día para el otro la puja en Capital Federal tomó nueva relevancia con la particular “interna en la general” que plantea Cambiemos con candidaturas de Elisa Carrió en la lista oficial y Martín Lousteau como muletto. La jugada estrecharía todavía más posibilidades del peronismo en un distrito históricamente complicado. Frente a eso, estrategias son dos. Un sector formado alrededor de la actual conducción del PJ porteño impulsa un frente amplio que sume a otras fuerzas del progresismo capitalino –con el doble objetivo de sumar votos de izquierda y no peronistas–, mientras que otro, con eje en La Cámpora, cree que debe priorizarse el liderazgo de la ex presidenta Cristina Kirchner para fortalecer el perfil opositor, con lo que deja afuera a fuerzas que no integran el Frente para la Victoria. La última encuesta, cerrada el viernes, muestra a Daniel Filmus como candidato mejor posicionado, incluso desplazando del segundo lugar a Lousteau. Filmus forma parte del primer sector.
Víctor Santa María es el presidente del PJ porteño. Desde hace un tiempo trabaja con la Corriente de la Militancia de Filmus y Gabriel Fuks y Movimiento Evita de Jorge Taiana por el armado de una propuesta amplia, en la línea del “frente cívico” del que habla Cristina Kirchner. Ya realizó encuentros con sectores que se alejaron del peronismo, como el que encabeza el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, y “papales” del senador Fernando “Pino” Solanas y legislador Gustavo Vera. También con líneas de la centroizquierda porteña, como el de economistas Claudio Lozano e Itai Hagman y socialista Héctor Polino, además de otros que ya integraban el FpV, como Forja del radical Gustavo López.
Tienen en preparación una propuesta de 30 puntos como eje programático. Entre otras cosas, plantean el fortalecimiento del mercado interno, pymes, políticas de memoria, verdad y justicia; proponen una reforma impositiva progresiva y paritarias libres, y se pronuncia en contra del ciclo de endeudamiento externo y flexibilización laboral, entre otros ítems. En uno de sus últimos puntos, el borrador en discusión propone: “Construir un gran frente, que incluya a todos los sectores sociales y políticos interesados en la construcción de un país más justo.” Esa convocatoria, amplísima, abarca un generoso abanico de posibles aliados a la izquierda de Cambiemos y sus satélites. Por ejemplo, Unidad Popular, fuerza de Lozano, aprobó esta semana aportar para “una propuesta transversal por emancipación”. Forja se pronunció el jueves en igual sentido.
En el Patria
Pero no todos miden la amplitud con el mismo criterio. El miércoles pasado se reunieron alrededor de una larga mesa en el Instituto Patria diputados Nilda Garré, Juan Cabandié, Carlos Heller y Axel Kicillof, bloque de legisladores porteños que encabeza Carlos Tomada, dirigentes y posibles candidatos Mariano Recalde y Gabriela Cerruti, todos representantes de líneas del kirchnerismo duro como La Cámpora, Nuevo Encuentro y Kolina, más miembros de otras fuerzas integrantes del FpV, como PC, Frente Grande y Socialismo para la Victoria. Discutieron generar un armado con una frontal confrontación al modelo macrista, del que no participarían quienes hayan votado propuestas del oficialismo –hasta ahí todos de acuerdo– pero tampoco quienes no reconozcan el liderazgo de Cristina Kirchner. Esta exigencia es la que deja varios excluidos, especialmente en la centroizquierda porteña.
Números
En ambos sectores sostienen que se acordará una lista de unidad pero tampoco sería un drama no ponerse de acuerdo y el asunto se resuelva en las PASO de agosto. En la semana ya se conoció un sondeo de Analogías que ubicaba mejor a Filmus que Cabandié en eventual primaria y, el viernes, la consultora CEOP, de Roberto Bacman, difundió un trabajo, ya con Lousteau como candidato. La encuesta ubica a Carrió, 37,7 por ciento, segundo a Filmus, 19,3 y Lousteau tercero, 19. El escenario además mide a Graciela Ocaña -sería candidata por Cambiemos pero en provincia–, 5,6, pero también Alberto Fernández –que se sumaría al armado peronista– 4,1.
El trabajo distingue entre quienes se identifican como oficialistas –44,3– y quienes como opositores –35,8–, pero dentro de ellos también a quienes conforman el “núcleo duro” de oficialistas y opositores y quienes orbitan en la periferia. En ese tipo de estudios el grupo de Santa María, Filmus y Taiana justifica su armado “amplio”. Argumentan que una lista sin homogeneidad peronista atraería un porcentaje del electorado inclinado a votar por Lousteau y algunos referentes progresistas servirían para morder simpatías a la izquierda dura, que mantiene cerca de 10 por ciento de potenciales votantes.
Queda por resolver cómo complacer aspiraciones de todos, en una cosecha que se calcula en tres diputados y seis o siete bancas de legisladores. En caso de ir a una primaria, por ejemplo, los dos primeros lugares de diputados serían para ganadores y tercero para quien pierda. Todos del peronismo. Además, para la lista de legisladores imaginan llevar más de una boleta, ahí sí acomodando a aliados en lugares expectantes.