Varios legisladores se jugaron sus chances de conseguir una victoria en sus provincias y acceder a cargos ejecutivos. En Rio Negro se disputan elecciones generales sin pasar por primarias abiertas. Allí el jefe de bancada kirchnerista en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, mantiene una disputa ajustada con el actual gobernador Alberto Weretilneck. Además, hay que esperar la definición voto a voto en Santa Fe.
La banca más importante de la bancada oficialista en la Cámara alta corría el riesgo de quedar vacante luego de las elecciones del domingo en Rio Negro. Pichetto no tardó ni un instante en acpetar el amplió resultado que lo consgadro segundo y sentenció: «Tal vez sea mi última eleccion, todo termina en la vida».
El jefe de bancada oficialista habia recibido el apoyo de las maximas figuras kirchneristas y era el único candidato del Frente para la Victoria en el distrito. El actual gobernador Weretilneck ganó claramente con el 52% de los votos.
«Esperaba otra cosa, pero la voluntad de los ciudadanos es la que manda», dijo Pichetto que antes de conocerse datos porcentuales concluyentes confirmaba que la tendencia era irreversible.
Por otra parte, en Santa Fe el exdiputado Miguel Del Sel buscaba consolidar la victoria de las PASO pero quedó a escasos dos mil votos del candidato socialista. En este caso, el candidato del gobernador Bonfatti, Miguel Lifschitz, se proclamóp vencedor en un final que aun es incierto.
El tercero, Omar Perotti también veía crecer sus chacnes tras realizar un aumento considerable de votos en comparación a las PASO y podría dejar una banca vacia para el FpV en Diputados. Sin embargo, quedó en tercer lugar y su suerte parece menor.
Dos elecciones donde el armado del Frente para la Victoria exposu legisladores de peso pensando en el armado del Congreso a futuro. Pero donde sobre todo, buscaba ganar distritos que quedarán riego en manos ajenas.