La compañía Google presentó un per saltum (salto de instancia) para que la Corte Suprema de Justicia intervenga en la demanda presentada por la vicepresidenta de la nación y presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, contra la empresa Google que ya tenía a su favor fallos de primera y segunda instancia.
Google recurrió a este recurso extraordinario, tras el rechazo de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal, que en una resolución reciente dejó firme el peritaje solicitado en agosto por la Vicepresidenta titular del Senado, en carácter de prueba anticipada.
En su presentación ante la Corte, la compañía estadounidense argumentó que «aún cuando no sea el único remedio previsto por la reglamentación procesal, es verdaderamente el único remedio ‘eficaz’ para la protección de los derechos en un plazo útil».
La presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, había presentado una denuncia contra la compañía estadounidense a principios de agosto, tras ser mencionada en el buscador como «ladrona de la Nación Argentina».
Los abogados de la Vicepresidenta y ex mandataria pidieron conservar todos los datos asociados a su nombre desde el 17 de mayo de 2020 hasta el día en que se realice el peritaje informático.
- El juez en lo Civil y Comercial Federal Javier Pico Terrero hizo lugar a esa solicitud de prueba anticipada, ante la que Google presentó una apelación al considerar «improcedente» la medida al interpretar que no cumplía con las razones que cita el Código Civil y Comercial para esta requisitoria.
La respuesta de la Cámara fue la validación de la resolución de primera instancia y la desestimación de la apelación de Google basada en la «inapelabilidad de las resoluciones del juez sobre producción, denegación y sustanciación de las pruebas».
El gigante de Internet atribuye su decisión de recurrir al per sáltum que la resolución de la Cámara «avanza sobre la propiedad privada y los secretos comerciales de Google, y pone en riesgo el derecho a la privacidad y seguridad de la información de los usuarios sin ninguna justificación».
El per saltum es un recurso extraordinario que significa salto de instancia ante un hecho de «gravedad institucional».
Para justificar la utilización de este recurso, Google sostuvo que con la resolución judicial de la Cámara «se afecta la seguridad jurídica y la consiguiente paz social» y «millones de usuarios verán comprometida la confidencialidad de sus datos», además de Google.
«En lugar de garantizar a los usuarios de Internet la seguridad y confidencialidad de sus datos, la resolución recurrida los expone en forma injustificada al escrutinio de un perito cuya confidencialidad nadie puede garantizar. Esta consecuencia trasciende la actividad propia de Google y constituye un supuesto de gravedad institucional», plantea Google en su presentación ante la Corte.
Por eso, en el último párrafo de las 35 páginas que recorre su presentación, la compañía solicita «tenga por presentado este recurso extraordinario por salto de instancia en tiempo y forma, y ordene correr traslado del mismo; se suspenda la Resolución Recurrida y la de primera instancia que ésta confirma; oportunamente declare admisible este recurso, revoque la Resolución Recurrida y deje sin efecto la medida de prueba anticipada, con costas».