Guillermo Kane, diputado del Partido Obrero en el Frente de Izquierda de la Legislatura bonaerense, se refirió a la frustrada votación del presupuesto provincial.
“El empantamiento del debate presupuestario pone de manifiesto una crisis política y social de fondo. Por un lado, tenemos a una provincia quebrada bajo la gestión de Scioli y el kirchnerismo, con una deuda cercana al 50% de sus ingresos, y un derrumbe educativo, sanitario, de vivienda y obras públicas esenciales. Mientras ocurría este desfalco, se reforzaba el entrelazamiento del Estado y sus partidos con el delito organizado, las mafias penitenciarias y el narcotráfico”.
“Como supuesta salida a esta quiebra, Vidal plantea un nuevo y cuantioso endeudamiento –que justifica con un difuso plan de obras que el pueblo no conoce ni ha debatido. Mientras se carga a la provincia con una hipoteca insoportable, terratenientes y sojeros pagan sumas ridículas por el impuesto inmobiliario rural. En contrapartida, hay un ajuste de recursos en salud y educación, se mantiene la precarización y no se contempla pautas salariales que compensen la actual inflación”. “Por otra parte –agregó Kane- las emergencias de seguridad y penitenciaria enviadas por Vidal a la Legislatura, al igual que la emergencia de infraestructura, sólo aumentarán la arbitrariedad en el manejo de recursos, salteándose licitaciones y controles. Le otorgan más fondos a organizaciones profundamente corrompidas como la bonaerense y el servicio penitenciario, en la búsqueda de un compromiso con sus cúpulas archicuestionadas”.
“Pero no son éstas las razones que han llevado al FPV a frustrar la sesión de anteanoche. El kirchnerismo no rechaza la hipoteca de la provincia, sólo quiere saber qué tajada le toca a su propia camarilla de funcionarios e intendentes. En las negociaciones por el presupuesto, los K han llegado al colmo de negociar la suspensión de las paritarias municipales, o sea, el ajuste para sus propias intendencias. En definitiva, lo que sale a la luz es la incapacidad de fondo de quienes gobiernan la provincia –y quienes lo hicieron en los últimos diez años- para darle una salida a la crisis planteada”.
Como conclusión, Kane señaló: “denunciamos que Vidal quiere aprovechar el empantanamiento legislativo en favor de un régimen de decretazos. Denunciamos al kirchnerismo por su responsabilidad en la bancarrota provincial y nacional, y por el compromiso que busca con el PRO a costa de los trabajadores. Es necesario que intervengamos en la crisis con un programa y una salida: basta de trenzas y conciliábulos secretos, que el debate del presupuesto se abra a la consideración popular; que el carácter y la finalidad de las obras públicas sea debatido en asambleas de los municipios; que las obras se financien con un fondo especial en base a un impuesto extraordinario a los b! eneficios obtenidos con la devaluación; por la estabilidad laboral y la satisfacción de los reclamos salariales”. Kane reclamó también “la interpelación a la gobernadora y su gabinete para esclarecer las centenares de denuncias judiciales, internas y de organismos de derechos humanos que pesan sobre funcionarios policiales y penitenciarios que ellos dejaron en sus puestos y que provienen de Duhalde, Solá y Scioli. Convocamos a las organizaciones obreras, juveniles y territoriales a intervenir en la crisis política, frente al pantano al que nos han llevado quienes han gobernado o gobiernan la provincia.”