22 de noviembre de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Gustavo Vera: Última donación como legislador

El diputado de la Ciudad de Bien Común realizó su última donación como legislador y cumplió así su promesa de campaña de 2013 cuando sostuvo que se quedaría solamente con el equivalente al salario de un director de escuela. Así, llegó a 1.500.000 pesos en cuatro años de gestión.

Ahora, los beneficiarios de los 45 mil pesos fueron los clubes Penacho Azul, Justo José de Urquiza, Fátima y San Diego, además de la Cooperativa 1 de Julio, entre otros.

Vera concretó así diferentes donaciones a entidades sociales, culturales, políticas, deportivas, clubes, medios periodísticos y diferentes asociaciones.

“Formamos parte de un programa para que chicos puedan hacer deportes y así sacarlos de la calle y darles contención. Recibimos donaciones de camisetas y ahora este dinero que nos ayudará muchísimo. Queremos agradecerle al legislador Gustavo Vera por este gran gesto”, precisaron representantes de clubes beneficiarios.

El Papa Francisco, acorde con lo que el legislador porteño llevó adelante, siempre dice que devolver el dinero al pueblo “no es caridad, es justicia”.

La última donación quedó registrada en la escribanía de Mario Rebasa (matrícula número 2259), en el Microcentro porteño.

 

 

 

 

 

 

 

 

Pero Vera no se quedó solo en donaciones, ya que mantuvo activa tarea parlamentaria, dentro como fuera de la Legislatura porteña que lo llevaron a ser elegido como el mejor diputado de la Ciudad consecutivamente durante 2016 y 2017, en una encuesta de la que participaron más de 5.000 lectores de la Revista Comunas.

En la actividad parlamentaria estuvo entre los cinco primeros legisladores más activos, con pedidos de informes al gobierno de la Ciudad y elaboración de proyectos, entre los más destacados aparecen la Ley 5639 para cerrar boliches de Clase C, donde se ocultan bajo la figura de alternadoras el negocio de prostíbulos, y fijar todos los 22 de marzo como el Día del Recolector de Residuos en homenaje al trabajador Maximiliano Acuña, que mientras hacía esa tarea un conductor alcoholizado chocó el camión y provocó que le amputaran las dos piernas.

Además, en 2014 presentó un proyecto para que los legisladores bajaran su sueldo y quedaran equilibrados con el salario de un director de escuela u hospital, pero perdió por 47 votos a 4, lo que provocó que esos diputados privilegiaran sus sueldos por encima de su ayuda a la comunidad, como originalmente debía ser.

Asimismo, presentó amparos judiciales y logró que la Justicia disponga suspender definitivamente un megaemprendimiento inmobiliario en el Palacio Roccatagliata en Coghlan.

También usó el mismo documento judicial para frenar la ley sancionada de Estacionamiento medido, más conocidos como parquímetros, porque se aprobó inconstitucionalmente (era de doble lectura y debía aprobarse con 40 votos y no 33 como se hizo). Además, playas de acarreo se construirían en lugares establecidos como Zona Parque según el Código de Planeamiento Urbano (CPU), cuando en realidad se tendría que votar y elegir por comunas el cambio de rezonificación para ser legal el proyecto.

Además, acompañó con presentaciones judiciales y asistencia a habitantes del conventillo incendiado en Pedro de Mendoza 1470 en La Boca.

También, Vera reiteró varias veces que esas personas regresaran al conventillo porque no había peligro de derrumbe como decía el Gobierno porteño, e incluso se presentó en la Justicia para intimar a la gestión de Horacio Rodríguez Larreta ante incumplimientos que cometió pese a órdenes de la magistrada interviniente.

El titular de La Alameda reveló para lograr todo esto como legislador siguió al pie de la letra tres consejos de su amigo el Papa Francisco y de los cuales se sintió “muy orgulloso” de llevarlos a la práctica.

“Mi amigo que ahora está en Roma (por el Papa Francisco) me dio tres consejos que cumplí y me siento muy orgulloso: cuando suba la escalera salude a todos los que están en el camino porque serán los mismos que veré cuando vuelva”, precisó.

“Nunca veré un camión de mudanzas detrás de un cortejo fúnebre y cuando uno llega más alto y más responsabilidad te da la sociedad más humilde y bajo tenés que estar, para servir al pueblo”, añadió.

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