La «doble vara» del discurso de las Sesiones presenciales tuvo un nuevo capítulo en Diputados
Uno de los mayores debates que se dio desde el inicio de la Pandemia fue la presencialidad en las Sesiones, tanto en Diputados como en Senadores. En la extensa jornada donde se trató el Aporte Solidario, entre otros Proyectos, y la “sorpresiva” aparición en el recinto de Sergio Massa, tras su falso positivo de Covid-19, el contrapunto reapareció en escena.
Fueron varios los Diputados opositores que en cada intervención reiteraron de su pedido para que el Congreso retome las Sesiones presenciales en lo sucesivo.
Así lo hizo saber, por caso, la diputada Mónica Frade, de la Coalición Cívica, de Quilmes, quien señaló «espero que si se hace presente no haya ningún caso Covid porque lo vamos a ser responsable a él» y criticó que «es el primero que no quiere las sesiones presenciales». Al respecto González le contestó: «Creo en la responsabilidad del presidente de esta cámara».
A su turno, el radical Álvaro De Lamadrid, también criticó la modalidad de funcionamiento remoto del Congreso y subrayó que «hay una nula predisposición para que la Cámara funcione en su plenitud». «Exigimos el funcionamiento normal del Parlamento, sino iremos a la Justicia», apuntó el diputado opositor. El macrista Waldo Wolff fue por el mismo sentido, al sostener que es preciso “volver a las sesiones presenciales”.
Si bien el debate no es nuevo, semanas atrás, oficialismo y oposición, habían logrado un acuerdo donde estipularon que, hasta el próximo 30 de noviembre, fecha en la que culmina el período ordinario en el Congreso, se extendería el Protocolo de Funcionamiento Remoto, que permite la realización de sesiones mixta.
En el mismo se dejaba asentado que «en caso de la solicitud por parte de un bloque político, a fin de proponer el tratamiento de un asunto con modalidad presencial y remota, la Cámara deberá arbitrar los medios para su realización, facultándose a la Presidencia para tal fin».
Pero la postura del oficialismo entra en una nebulosa cuando se dan situaciones como la de hoy, ya que en el recinto se pudo ver la presencia de muchos funcionarios y Ministros que poco y nada tenían que hacer, si lo que se pretende es cuidar y cuidarse.
Allí estuvieron los ministros Martín Guzmán, Matías Kulfas y Daniel Arroyo, la titular de Aysa, Malena Galmarini, del PAMI, Luana Volnovich y de ANSES, Fernanda Raverta.
Incluso se pudo ver en los palcos a la intendenta de Quilmes Mayra Mendoza, el de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde y el de San Vicente Nicolas Mantegaza y el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense Federico Otermin.
Si bien es cierto que la excusa de su presencialidad fue una reunión para “apoyar” el Proyecto del Aporte Solidario, tranquilamente podrían haber manifestado su confianza de otra manera, quizás virtual, quizás con conexión remota. Porque entonces no se explica porque, esas casi diez butacas, no pueden estar ocupadas la próxima vez por aquellos Diputados que, tal vez, tenían la voluntad de ocupar sus legítimos lugares, pero debieron ajustarse al reglamento y dar su “presente” detrás de un monitor.
Claro está que la “doble vara” en el discurso, no sólo afecta a la bancada oficialista, sino que el bloque de Juntos por el Cambio también tiene lo suyo, como lo dejo ver la Diputada del Frente de Todos, Grabiela Cerruti, quien pidió la palabra para hacer notar que “muchos Diputados pregonan las sesiones presidenciales, pero les duró hasta que comenzó Argentina (NR: En el mismo momento del debate el Seleccionado de Fútbol enfrentó a su par de Perú en una nueva fecha FIFA) porque no quedó nadie presente, si van a querer venir por lo menos vean de escuchar el partido de otra manera” fustigó.