La ex ESMA para la Nación
En una sesión que duró cerca de cuatro horas, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires traspasó los ex centros clandestinos de la órbita de la Ciudad a la Nación, disolución del Instituto Espacio para la Memoria (IEM), permitiendo al Ejecutivo pedir un préstamo para pagar deudas.
En primera instancia, el Pro solicitó modificar el orden del día y votar los expedientes propuestos por el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, para que disuelva el IEM y autorice el convenio que permite el pase de todos los espacios de la memoria de la Ciudad de Buenos Aires a la Nación.
El apoyo del Frente para la Victoria fue vital para que el oficialismo porteño consiga los 40 votos para dar tablas y sean puestas en consideración. Finalmente, con 41 votos positivos y 16 negativos, se aprobaron los expedientes para el traslado, que ya aprobó el Senado, y que disuelven el Instituto Espacio para la Memoria y pone en funcionamiento el Consejo Asesor en Políticas Públicas de Memoria.
Los predios que pasarán a depender del Gobierno nacional son el de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), Virrey Cevallos, Club Atlético, Olimpo y Automotores Orletti.
Ante el temor y planteos de los empleados del IEM acerca de su situación laboral, el legislador del Pro Helio Rebot, que habló en nombre de su bloque, marcó: “la estabilidad de los trabajadores será resguardada en las mismas condiciones actuales”.
“Con una política pública consagrada por la ley de protección de sitios de memoria, lo mejor es que pasen a la órbita del Gobierno nacional”, justificó la jefa de la banca del FpV, Gabriela Alegre.
El convenio es de carácter jurisdiccional y es necesario el visto bueno del Congreso, algo que ya sucedió en la Cámara alta hace unos días. Se espera que la Cámara de Diputados haga lo propio, ya que el expediente obtuvo despacho de mayoría en las comisiones de Presupuesto y Hacienda, Legislación General y Derechos Humanos.
Como se sabía, el frente UNEN votó completamente en contra, junto al MST, FIT, Confianza Pública y la legisladora de Nuevo Encuentro Gabriela Cerruti.
Por otra parte, con el apoyo de un sector del frente UNEN, el Pro consiguió llegar a los 33 votos y dar el visto bueno a la iniciativa, también propuesta por Mauricio Macri, que permite al Ejecutivo porteño a tomar un préstamo en el exterior para regularizar su deuda.
La operación se concretaría mediante una o más emisiones de títulos de deuda por hasta 185.000.000 millones de dólares, o su equivalente en pesos, otra u otras monedas, para la amortización de deuda y permitir así alcanzar a la Ciudad un mayor ordenamiento de su administración financiera.
Todo el bloque del Frente para la Victoria votó en contra, al igual que el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, Verde Alameda y el MST.
El vicepresidente del bloque kirchnerista, Gabriel Fuks, cuestionó el pedido de deuda e hizo hincapié en que “la lógica del Gobierno de la Ciudad bajo la gestión del Pro es aumentar la deuda año tras año y dejar una mayor”.
“La Ciudad va a contramano de Nación. Mientras, a nivel nacional desde el 2003, el país tuvo el desendeudamiento más grande de la Historia Argentina, la ciudad incrementa proporcionalmente el suyo”, se quejó.