Al igual que los diputados nacionales de Juntos por el Cambio, los legisladores cordobeses adelantaron que tampoco acompañarán la reforma del Ministerio Público Fiscal que el oficialismo quiere aprobar y que retomó el debate con la visita del ministro de Justicia Martín Soria a una Comisión en el Congreso.
En ese sentido, el bloque de diputados Córdoba Federal anunció que mantendrá su postura y no acompañará la reforma del Ministerio Público Fiscal luego de que Soria diera a conocer cambios en el proyecto que ya tiene media sanción en el Senado.
Para los legisladores cordobeses, la propuesta de reforma está fuertemente impulsada por Cristina Kirchner y atiende intereses netamente personales de algunos funcionarios que tienen complicaciones judiciales.
Justamente, el nombre de la vicepresidente es el que más rechazo genera en Córdoba, y sobre el cual el gobernador Juan Schiaretti, que tiene altos números de imagen positiva en la provincia y en el país, no quiere ser vinculado debido a convicciones políticas y personales.
La decisión del bloque no sorprende ya que desde hace tiempo que los diputados Carlos Gutiérrez, Paulo Cassinero, Claudia Márquez y Alejandra Vigo, se vienen mostrando esquivos a los deseos del oficialismo y no sólo no prestan quórum sino que, a diferencia de lo que sucedió en 2020, el bloque suele votar en contra.
El ministro de justicia introdujo cambios en la reunión llevada a cabo en el 28/04, concernientes a los tribunales de enjuiciamiento, jurados en concurso para elección de fiscales, límites en los interinatos de los mismos. Pero lo que no cambió es lo que todos los opositores rechazan: flexibilizar los requisitos en el Senado para designar al Fiscal General de la Nación.
Irónicamente, Córdoba designó a su procurador General con requisitos más flexibles que los impuestos en Nación. La intención del gobierno nacional es terminar con el mandato del procurador interino, Edgardo Casal, nombrado por Mauricio Macri.