Leavy pidió el repudio del Senado ante la represión en Jujuy
Luego de varias jornadas de protesta y represión en la provincia de Jujuy, el senador nacional por Salta, Sergio Leavy presentó un proyecto de Declaración para que la Cámara Alta exprese “un enérgico repudio a los hechos de represión y violencia institucional sucedidos en la provincia de Jujuy durante el proceso de Reforma de la Constitución Provincial y en el marco de los reclamos salariales de docentes y personal de la salud, que han derivado en un severo conflicto, afectando a toda la sociedad jujeña en su conjunto y especialmente a las comunidades originarias”.
En el texto del proyecto de Leavy, también se “exhorta al Gobernador de la Provincia de Jujuy a convocar al diálogo, a respetar el legítimo derecho del pueblo a manifestarse, a expresar libremente sus opiniones y a peticionar ante las autoridades sin limitaciones irrazonables”.
En los fundamentos del texto legislativo, se indica que “la represión brutal llevada a cabo, así como la privación injusta de la libertad de los docentes y trabajadores, merece el repudio de todos los partidos políticos y de las fuerzas democráticas. Estas acciones buscan intimidar a los trabajadores y coartar su legítimo y elemental derecho a la protesta y peticionar ante las autoridades, un derecho que está salvaguardado por los principios básicos de nuestra organización constitucional”.
En el proyecto también se hace referencia a las recomendaciones del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en torno, no solo a la violencia frente a las manifestaciones de docentes, personal de salud y representantes de pueblos originarios, sino también a algunas de las disposiciones del texto de la reforma constitucional provincial aprobada.
Al respecto, el legislador salteño se expresó en el mismo sentido en sus redes sociales y también firmando el comunicado emitido por el Partido de la Victoria nacional, en donde señalan: “Con profunda preocupación vemos que, a 40 años de la recuperación de la Democracia, por primera vez una reforma constitucional promueve un texto profundamente regresivo en materia de Derechos Humanos”.