Tras una rápida movida de docentes y padres, con el apoyo de legisladores y funcionarios, el salvataje del colegio cerrado abruptamente a principios de este año, se hizo real.
Esta tarde se constituyó formalmente la cooperativa de trabajadores del Colegio Guido Spano, cuyo cierre, sorpresivo, trascendió el 2 de enero. La cooperativa, para cuya conformación los trabajadores docentes y no docentes recibieron asesoramiento del Instituto Nacional de Asociatividad y Economía Social (Inaes), contará con apoyo de padres, diez de los cuales, en representación de los demás, participaron de una de las reuniones para comprometerse con el proceso de reconversión. Por su parte, la legisladora porteña María Rachid, que también participó de las reuniones, presentará un proyecto de ley para expropiar el edificio del colegio, y darlo en comodato a la cooperativa.
Por otra parte, la diputada nacional Ramona Pucheta pidió a la Justicia que investigue por asociación ilícita y lavado de activos a Mauricio Sánchez, apoderado del Guido Spano y sobre cuyas cuentas bancarias pesa un embargo judicial.