La Legislatura porteña renovará el próximo 3 de diciembre la mitad de sus 60 bancas en el marco de una Sesión Preparatoria en la que jurarán los próximos diputados para el período 2019-2023, y en la cual también se votarán a las nuevas autoridades del Parlamento.
El recambio legislativo se dará durante una sesión especial convocada por el vicepresidente primero, Agustín Forchieri, a las 9.30.
Según fuentes parlamentarias, se tomará juramento a los 30 flamantes diputados, de los cuales 17 serán de Juntos por el Cambio, 11 del Frente de Todos, 1 del Frente de Izquierda-Unidad, y 1 de Consenso Federal, que responde a Roberto Lavagna.
Asimismo, se estima que posteriormente a la jura se llame a la votación de las autoridades de la Legislatura, es decir, las tres vicepresidencias y las secretarías parlamentaria y administrativa.
Con el recambio legislativo, la distribución de las bancas en el recinto registrará modificaciones ya que el oficialismo -que reunirá al PRO, la Coalición Cívica, Confianza Pública, el radicalismo referenciado en Martín Lousteau y el socialismo- pasará de 41 a 37 escaños.
En ese marco, aún se desconoce si permanecerán en un solo bloque, que podría estar conducido por el diputado Diego García Vilas –que responde a Graciela Ocaña– o elegirán funcionar como un interbloque pese a que en la Legislatura porteña esa figura no está reglamentada.
Del lado del Frente de Todos, la situación parece más allanada dado que, durante una reunión de los legisladores porteños con el presidente electo Alberto Fernández, quedó en claro que el trabajo parlamentario los debe encontrar «unidos» en una sola bancada, que tendrá 17 escaños y estará presidida por Claudio Ferreño.
Por su parte, el bloque del Frente de Izquierda-Unidad continuará con tres bancas, Autodeterminación y Libertad perderá un escaño y quedará como monobloque, al igual que el GEN de Sergio Abrevaya que podría aliarse con el diputado electo de Consenso Federal.