Macri sobre cambio climático, igualdad de género y refugiados
Macri destacó la vocación argentina de ser parte de la agenda global, llamó al Reino Unido al diálogo para «solucionar amigablemente» la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, reafirmó la decisión argentina de abrir sus puertas a refugiados sirios y agradeció el apoyo recibido por la canciller Susana Malcorra en su candidatura hacia la secretaría general de ese organismo.
«Miramos los objetivos de desarrollo sostenible y nos enorgullece que nuestras prioridades de gobierno estén alineadas con las de la sociedad internacional», dijo el Jefe de Estado argentino en su primer mensaje ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, que inicia el 71 período de sesiones ordinarias.
En este sentido, el mandatario afirmó que los argentinos están «listos para entrar al siglo XXI» y asumir su «rol en la sociedad internacional», y llamó a los países que aún no lo hicieron a suscribir el Acuerdo de París para combatir el cambio climático, que Argentina ya firmó pero que requiera de la adhesión de al menos 26 países más para que pueda entrar en vigencia.
El mandatario, que habló en séptimo lugar luego de Qatar y antes de Eslovaquia, asumió en este marco la vocación cooperativa y pacífica de Argentina, y confió en alcanzar «una solución definitiva al diferendo con el Reino Unido por la soberanía sobre las Islas Malvinas».
«Confiamos que será posible activar las negociaciones y encontrar una solución definitiva a este prolongado problema», dijo Macri, quien afirmó ante los líderes mundiales presentes en el recinto que se han dado «muestras de interés en avanzar» en la relación bilateral sin olvidar que «puede y debe ser mutuamente beneficiosa».
En ese marco, el Presidente hizo un «llamado al diálogo con el Reino Unido» tal como -indicó- «mandan tantas resoluciones» de la ONU, para «solucionar amigablemente la disputa de soberanía» sobre las Islas que lleva casi dos siglos.
Luego, el Presidente se dirigió al secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, y abogó por que el organismo siga apostando a «tender redes y puentes «, y dijo: «Cuenten con la Argentina, tenemos mucho para decir y para hacer».
«Es hora de contribuir con toda nuestra creatividad y voluntad política para hacer realidad la meta de Naciones Unidas de lograr una vida mejor». subrayó.
En este marco, el Presidente confirmó la «ampliación de la recepción de refugiados de Siria y países vecinos, privilegiando grupos familiares con niños», y dijo que la idea del gobierno es «ir incrementando gradualmente la capacidad de recepción» de refugiados, que empezará siendo de 3.000, en la medida que llegue «el acompañamiento financiero, la asistencia técnica y el apoyo logístico internacional», indicó.
«Las imágenes de las que somos testigos nos duelen y nos preocupan. La realidad pide que hagamos algo más», reflexionó Macri.
El mandatario también habló de la necesidad de entender que la gobernanza global en el siglo XXI «no es exclusividad de algunos países o regiones», sino que «concierne a todos», y, por eso, dijo que no hay que perder de vista el primer principio de las Naciones Unidas que es «la igualdad soberana de todos sus miembros».
«Un mundo con más voces es un mundo más justo», aclamó Macri, al tiempo que abogó por «continuar edificando un sistema basado en reglas claras que reflejen la diversidad y la pluralidad, y faciliten los consensos».
En cuanto a la contribución de Argentina al escenario internacional, recordó el trabajo que hacen los Casbos Blancos en zonas de conflicto mundial, como en un campo de refugiados de Líbano.
También, el Presidente mencionó con orgullo que Argentina impulsó «avances en derechos humanos, humanitario y solución pacífica de conflictos», y dijo que, ahora, el país tiene tres objetivos como horizontes: avanzar en alcanzar la meta de pobreza cero, derrotar el narcotráfico y unir a los argentinos a través del diálogo, respetando la ley el fortalecimiento de la democracia.
«Nuestra primera meta es avanzar hacia la pobreza cero. No podemos aceptar que en un país como el nuestro, que es una potencia productora de alimentos, haya personas pasando hambre», dijo, y marcó su compromiso para lograr un país con «igualdad de oportunidades, donde cada argentino pueda desarrollar su potencial».
En cuanto al narcotráfico, dijo que se requiere trabajar en una «agenda integral basada en los derechos humanos, y concentrada tanto en la oferta como en la demanda», porque, indicó, «el narcotráfico está relacionado a las adicciones, y la violencia asociada al crimen organizado».
En cuanto a la tercera meta, Macri dijo que tiene que ver con «la calidad del liderazgo político» y, en ese sentido, dijo que éste «se mide por la capacidad de construir puentes y crear confianza».
La igualdad de género también fue parte de su mensaje, y, tras afirmar que «el empoderamiento de las mujeres en la vida social, política, económica y cultural es una política de Estado», agradeció el apoyo recibido por la canciller Susana Malcorra en su candidatura para encabezar las Naciones Unidas.
«Quiero agradecerles el apoyo que ha recibido nuestra canciller para la Secretaría General de las Naciones Unidas», expresó el mandatario.
En este sentido, agregó que, «en el siglo XXI, tener una mujer al frente de esta organización, sería un ejemplo alentador».
Al referirse a la Argentina y al momento que está viviendo el país, Macri afirmó que se trabajó «sobre los problemas del pasado, para poder mirar el futuro» y que, en ese proceso, «se normalizó la macroeconomía, el fortalecimiento de las relaciones con los países vecinos y los organismos multinacionales».
«Ya se están empezando a ver los resultados», aseguró el mandatario ante los jefes de Estado presentes en la Sala de la Asamblea General, y mencionó que Argentina está volviendo a los mercados internacionales de crédito, y han llegado muchas empresas que «han demostrado que confían en la Argentina».
Por otro lado, ratificó la voluntad argentina de «trabajar juntos con los países vecinos» y asumió que, para «crecer con inclusión, América latina cuenta con un gran talento humano además de riquezas naturales inigualables».
Recordó que Latinoamérica «hizo grandes esfuerzos por reducir la pobreza», y que el contexto es de escaso crecimiento, «comercio global magro», y alta inflación, que «castiga a quienes menos tienen».
Macri dijo, sin embargo, que hay tendencias alentadoras en la región, como la normalización de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, el proceso de construcción de paz en Colombia, y las condiciones que se dan para crear un corredor de paz del Atlántico al Pacífico, que «contribuyen a la estabilidad y la prosperidad regional».