El senador nacional por La Pampa Juan Carlos Marino mantuvo una reunión con representantes de la Unión de Emprendedores de la República Argentina (UERA) -encabezados por su Presidente Rodolfo Llanos-, de la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Empresa (CAPYME), de la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN) y de Industriales Pymes Argentinos (IPA). El propósito de la misma fue relanzar el proyecto de reactivación económica, en pos de lograr su pronto tratamiento y su posterior sanción como ley.
La iniciativa, trabajada junto al diputado nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires Jorge Enríquez y la UERA, y que fuera presentado en ambas cámaras del Congreso por los legisladores en 2020, establece grandes beneficios para pequeñas y medianas empresas, para fomentar así la generación de puestos laborales.
Entre los beneficios planteados, incluye la implementación de programas de créditos y microcréditos; programas de formación profesional y capacitación; de reactivación de emprendimientos paralizados, modernización, adquisición de equipamiento y nuevas tecnologías; y la promoción entre las jurisdicciones provinciales y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y entre los municipios, para el otorgamiento de incentivos.
Asimismo, fomenta el desarrollo de las Economías Regionales, acordando beneficios en polos productivos según su actividad y ubicación geográfica; promueve la generación de empleo joven y destinado a otros segmentos de la población castigados por la falta de oportunidades laborales; y propicia la incorporación de beneficiarios de planes sociales y trabajadores de la economía informal al mercado laboral formal, entre otras medidas.
Marino explicó que «el Estado debe ser un socio dinámico, moderno y con visión de futuro para estas pequeñas y medianas empresas. Las pymes generan el 70% de la mano de obra privada, debemos ayudarlas a atravesar este difícil contexto y transformar esta crisis en una oportunidad para brindarles una legislación que esté a la altura de las circunstancias. Emprender suele ser difícil en la Argentina en situaciones normales, si a la ecuación le sumamos una pandemia, el panorama es verdaderamente desolador».
El momento es ahora, si esperamos a que llegue la tan ansiada "normalidad", será demasiado tarde para muchas empresas, no habrán logrado sostenerse. Estamos convencidos que es el camino: si al talento y la valentía de los emprendedores argentinos, le sumamos un Estado que les facilita herramientas que los ayuden a crecer, vamos a obtener grandes resultados.
En nuestro país hay 670 mil empresas con entre 1 y 5 empleados, si cada una de ellas pudiese contratar 1 empleado más, descendería considerablemente el desempleo en el país. Y todo esto es posible de lograr sin tocar un sólo derecho actual de los trabajadores.
El beneficio será para todas las partes involucradas: empresas que se sentirán acompañadas y podrán crecer, un Estado que recaudará más por haber logrado un mayor nivel de producción y trabajadores que contarán con más y mejores oportunidades laborales» finalizó.