El referente del espacio que resultó ganador en las elecciones nacionales de ayer, Sergio Massa (Frente Renovador Peronista – Buenos Aires) estimó que no tiene entre sus objetivos la presidencia que se disputará en 2015 y deslizó críticas a los que con dos años de anticipación están planeando la carrera por la sucesión de Crisitna Fernandez (FPV).
En ese sentido, manifestó que «el que tiene la cabeza puesta en 2015 le falta el respeto a la gente» y agregó que «hay que pensar en el mañana, en cómo resolvemos los problemas». A su vez, evaluó que «la gente quiere dirigentes que se ocupen de los problemas de todos los días» y que «está harta de los proyectos personales».
En otro órden, el líder de la coalición que ayer logró 16 bancas en la Cámara baja, y que hoy perdió por migraciones al PRO, estimó que los proyectos que él elevará «la gente sabe que las soluciones no son mágicas, pero sabe que las vamos a pelear con uñas y dientes».
Entrevistado por la señal de cable del Grupo Clarín, TN, se califió «Yo soy un tipo dialoguista, que trabaja buscando acuerdos, voy a intentar legislar buscando acuerdos, pero tenga la firmeza para tratar de imponerme en temas que creo importantes (…) vamos a trabajar fuerte con los intendentes y con todos aquellos que tengan ganas de articular políticas en base a lo que expresó la gente (…) vamos a trabajar en función de lo que quiere la gente (…) vamos a trabajar con todos los dirigentes que quieran trabajar para el futuro».
Massa reveló parte de los llamados que recibió ayer tras la victoria por más de 10 puntos sobre el candidato del Frente para la Victoria, Martín Insaurralde. Entre ellos mencionó dirigentes políticos como el exministro de Economía, Roberto Lavagna, el senador Carlos Reutemann, y el flamante diputado Mario Das Neves, además de el gobernador Daniel Scioli y el propio Insaurralde. Pero también mencionó al futbolista de Boca, Juan Román Riquelme, y al delantero Darío Cvitanich.
Massa aseguró además que ahora es momento de «asumir con responsabilidad» el resultado de las urnas. «Lo que hacemos y pensamos tiene que servir para que la gente viva mejor», lanzó.
Además, reiteró que «hay cosas que la gente no quiere más, quiere que se termine la política de la pelea». En ese sentido dijo que los dirigentes «no deben llevar al plano personal las discusiones» políticas.