Máximo excluyó al Presidente de una cumbre por la estrategia electoral en el conurbano
En medio del hermetismo y la tensión que hay sobre el enfrentamiento entre el presidente Alberto Fernández y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, funcionarios cercanos al mandatario le habrían recomendado encapsular el conflicto para evitar que la coalición se quiebre. En ese marco, Máximo Kirchner, en su rol como presidente del PJ Bonaerense, convocó a una reunión en Merlo para encontrarse con los intendentes que gobiernan distritos en la primera y tercera sección electoral. Los municipios más poblados de toda la provincia de Buenos Aires, determinantes en cualquier elección que haya en el país.
Asimismo, el líder de La Cámpora invitó al encuentro al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y al ministro De Pedro, convirtiéndose en un gesto político de respaldo al funcionario luego de unos días de máxima tensión interna. Ambos estarán presentes en la quinta municipal “La Colonial” desde las 19. A ese bloque de dirigentes podría sumarse el ministro de Economía, Sergio Massa.
En tanto, para el encuentro de hoy habrá un temario abierto: Actualidad política, situación de las gestiones municipales, calendario de las elecciones y estrategia electoral en el conurbano bonaerense, el punto geográfico clave para el peronismo, donde en esta oportunidad tendrá que librar una compleja batalla con Juntos por el Cambio, cada vez más fuerte en los distritos bonaerenses.
Cabe destacar que Alberto Fernández no fue invitado a la reunión. Además de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, es la única figura de la primera línea del Frente de Todos que no estará presente en un encuentro donde se hablará de las estrategia electoral bonaerense. De todas maneras, el mandatario insiste con su voluntad de competir en los próximos comicios, encontrando apoyos inesperados. Como el del gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, quien avaló su candidatura pese a ser uno de los mandatarios más cercanos a Cristina Kirchner.
“El espacio de representación del Gobierno debe quedar solamente para una persona. Esto significa que, si el Presidente tiene la voluntad de ir por la reelección, ningún ministro ni representante del espacio debería competir, porque se supone que el espacio lo representa el Presidente”, había asegurado Capitanich.