8 de noviembre de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Máximo Kirchner rompió el silencio: «JxC están viendo quién mata al primer peronista»

El diputado nacional Máximo Kirchner sostuvo que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta «puso en riesgo la vida de policías y manifestantes» al referirse al operativo en la casa de Cristina en Recoleta.

 «La oposición tiene un concepto muy arraigado de sobreactuar, de querer dar una imagen que seduce a un posible votante y que pone en riesgo un motón de cosas, incluso la vida», completó.

En ese sentido lanzó que el jefe comunal «tiene un discurso muy denigrante para el que no piensa como ellos, muy despectivo y amparado por una cortina de medios».

«Son violentos porque no tienen ideas para proponer», dijo en declaraciones al Destape Radio.

El dirigente de La Cámpora se refirió a los hechos de violencia que la Policía de la Ciudad desató en su contra horas después de la represión frente a la casa de Cristina Kirchner. El hecho fue registrado en un video donde se ve cómo los agentes no le permiten pasar el vallado mientras él se resiste y el policía que filma lo insulta.

“Yo escuché todos los insultos, lo dijeron los policías de mayor edad”, recordó y admitió que luego de lo ocurrido él y sus allegados decidieron no publicar nada al respecto porque “no me gusta victimizarme”.

Sin embargo, añadió, “fue un video de la propia policía el que apareció” en las redes. “Se ve que el policía quiso hacer una demostración y el video se le filtró”, pero “de nuestra parte no hubo una intención nuestra en mostrar” esas escenas, relató durante una entrevista con El Destape Radio.

Lo cierto es que “cuando llegamos al cordón (policial), la idea era entrar despacito, pero hubo un par que se sacaron. Yo les vi la cara. No tenía sentido lo que hicieron”.

“Empezaron a insultarme y hubo un intercambio de insultos” salvo con uno, que tenía mayor rango y “que fue muy gentil pero no podía parar a los propios” porque “los subalternos no le daban bola”.

Máximo Kirchner acusó a la dirigencia de Juntos por el Cambio del “grado de violencia” generado. “Son violentos porque no tienen mucho para proponer. Tienen un discurso denigrante y estigmatizante a quienes no pertenecen a su clase social”, dijo.

“Están viendo quién mata al primer peronista, quién golpea a los pibes, quien saca chapa de cowboy”. Y si esto continúa así, “va a terminar mal para las fuerzas de seguridad, porque cuando la dirigencia juega a los cowboy termina mal para los policías, que van presos” mientras los dirigentes siguen ejerciendo sus funciones.

En este sentido lanzó un llamado de atención: “Tendrán que revisar las fuerzas de seguridad a qué están dispuestas o no por esta construcción de poder de las elites argentinas”.

Máximo Kirchner sostuvo que los hechos del fin de semana pasado durante las movilizaciones de apoyo a la vicepresidenta fueron producto del vallado decidido por el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. “Estaban prevista actividades en otros lugares, Juncal y Uruguay (donde vive CFK) no era un punto de concentración”, aclaró.

Sin embargo, “en un intento de sobreactuar” y “querer dar una imagen a sus votantes”, Rodríguez Larreta “tuvo la buena idea (de poner vallas) para congraciarse con Mauricio Macri y demostrar a Patricia Bullrich que es más duro que ella”.

“Larreta generó la movilización” y lo hizo porque en Juntos por el Cambio “están en una competencia de falta de ideas, y creen que la demostración de poder la tienen que hacer en contra de la gente”, indicó.

La represión de ese día y lo ocurrido durante las jornadas anteriores y posteriores fue la puerta de entrada “a algo muy peligroso” y que tiene como blanco a Cristina Kirchner.

“Hasta que no la vean presa aunque sea 5 minutos no van a parar”, advirtió. “Hay alguien que tienen ese berretín” y lo deja evidenciado en “estas demostraciones de autoridad con ella”. Es como si dijeran “voy a hacer lo que se me cante y no me importa nada porque hay que hacer una demostración de autoridad”, agregó.

No obstante, resaltó la actitud pacífica de quienes se movilizan desde la semana pasada hasta el departamento de Recoleta. “La gente demostró que no quería golpear policías sino que armó un cordón para poder salir”.

Luego cuestionó al Gobierno de la ciudad por haber dejado dos containers de piedras en las cercanías de esa vivienda: “Dejaron piedras para que la gente se las tire a sus propios policías”, señaló e insistió que la violencia provino de un solo lado.

“Hubo muchos compañeros con la cabeza rota, muchos insultos y promesas de abusos y violaciones por parte de la propia policía. Le decían barbaridades a nuestras compañeras”, denunció.

Por otra parte, el diputado volvió a cuestionar el acuerdo arribado por el gobierno nacional con el FMI durante la administración de Martín Guzmán al frente de Economía. “Lo de Guzmán fue un desastre, fue malo y no tengo problemas en decirlo”, disparó y acusó al organismo internacional de presionar.

“El FMI se lavó la cara y al jabón y al agua lo pusimos los argentinos”, dijo y subrayó que si desde el Fondo “nos prometen el infierno, hay que decírselos a los argentinos y argentinas”.

“Tenemos que ver por dónde salimos y entender qué es bueno para nuestro país. Después la sociedad decidirá quién los represente, pero no hay que suprimir al adversario político” porque si no “va a ser difícil que el nuestro país salga adelante”, advirtió.