Negri acusó al oficialismo de no querer modificar la Ley de Alquileres: «No sé a quién defienden»
El jefe del bloque de diputados nacionales del radicalismo, Mario Negri, se refirió a las negociaciones en el Congreso para intentar modificar la Ley de Alquileres. Al respecto, indicó que “esta mala ley se hizo en 2020 previendo que no haya inflación, por eso fracasó rotundamente”, y recordó que “desde junio del año pasado, nosotros en la oposición queremos corregirla, pero el kirchnerismo lo obstaculiza. Acá en Capital Federal hay 170 mil viviendas vacías, solo hay 10 mil casas en oferta y antes la oferta era de entre 50 mil y 70 mil unidades”.
En declaraciones radiales, Negri planteó que “nosotros hicimos un dictamen con toda la oposición, porque la ley de 2020 establecía 3 años y una actualización anual en base a la inflación. El dictamen nuestro vuelve a dos años y establece que el ajuste sea acordado por las partes, con una actualización que puede ir desde 3 meses a un año. El kirchnerismo tiene una anteojera ideológica porque con su tesitura se castiga al votante de ellos también. Es una enorme ceguera”.
En tanto, añadió que “te dicen que es una cosa de la derecha, pero hacen un monumento a la insensatez. Perjudican tanto a los inquilinos como a los propietarios. Porque acá la verdad es que el kirchnerismo quiere sostener la ley como está. Hay algo patológico del kirchnerismo, no sé a quién defienden, a la gente seguro que no”.
Ayer miércoles, “como en todas las sesiones, se pidió incluso la derogación de la Ley de Alquileres y el kirchnerismo lo rechazó. Entonces yo propuse en medio de la sesión, que el recinto convocara una sesión especial para tratar Alquileres el día 23 de agosto. Ese día sabremos quién está y quién no está”, planteó. Y remarcó que durante la sesión, “para que los muchachos del kirchnerismo digan dónde están parados, 13 presidentes de bloques firmamos el pedido de sesión. Si todos los que firmaron cumplimos con el compromiso tomado ayer, el 23 de agosto tenemos quórum, podremos sesionar. Somos más que los kirchneristas. Esperemos que hasta el 23 se pueda mejorar el proyecto para tener más consenso todavía. Lo que no se puede hacer es ignorar la realidad, porque así nos va a la política con este divorcio que hay con lo que le pasa a la gente”.
“Yo firmé primero el dictamen de minoría hace un año y luego hace poco acompañé la derogación total porque observamos que el kirchnerismo cajonea el tema. Debemos tener plasticidad para encontrar un punto en común porque no puede haber falta de respuestas. Lo ideal, en tiempo de transición, es la derogación, pero no sé si eso junta todas las voluntades. Confío en que el 23 haya una respuesta”, concluyó.