Oficialismo y oposición en el Senado buscan volver a dialogar para acordar sobre sesiones remotas
El oficialismo y la oposición en el Senado revelaron hoy su voluntad de seguir dialogando para acordar el mecanismo de las sesiones por videoconferencia, cuya última prórroga fue recurrida por el interbloque de Juntos por el Cambio ante la justicia ordinaria porque, para ser válida, estiman que necesitaba el voto de los dos tercios de los senadores presentes en la sesión del miércoles pasado.
El gesto de acercamiento ocurrió durante la jornada de ayer, antes de la firma del dictamen de la Ley de Economía del Conocimiento que será debatida la semana que viene en la Cámara alta.
En un plenario de las comisiones de Sistemas, Medios y Comunicación y de Presupuesto y Hacienda, el jefe del bloque de senadores del Frente de Todos, José Mayans, pidió «seguir dialogando» para «no paralizar el Congreso».
«Estamos abiertos al diálogo de manera permanente. La visión nuestra es seguir trabajando y no paralizar el Congreso. Debemos seguir dialogando», enfatizó Mayans cuando un sector de Juntos por el Cambio expresó que a su criterio lo que decida el Senado puede ser tildado de «nulo», si la Justicia considera que se violó el Reglamento de la Cámara.
Además, el senador oficialista formoseño reveló que estaba hablando con su par de Juntos por el Cambio, Luis Naidenoff, con el objetivo de explorar un acuerdo.
Por su parte, la oficialista mendocina Anabel Fernández Sagasti pidió «poner delante de los intereses partidarios las funciones para las cuales» los legisladores fueron «elegidos».
«Espero que podamos seguir dialogando y que resolvamos estas diferencias en el pleno del Senado», destacó.
Previamente, el senador radical por La Rioja Juan Carlos Martínez reclamó que la presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, «tiene que convocar a los presidentes de los bloques y llegar a un acuerdo».
«¿Cómo no podemos llegar a un acuerdo si Diputados ya lo hizo?», se preguntó Martínez, en referencia al arreglo logrado en la Cámara baja luego de que la oposición hiciera un planteo similar.
Previamente, el macrista Esteban Bullrich había manifestado que se estaba «debatiendo en el marco de una irregularidad por la extensión de la prórroga», en tanto su compañero de bancada, el pampeano Juan Carlos Marino, subrayó la propuesta opositora de hacer sesiones presenciales con los recaudos correspondientes.
«Hay un montón de argentinos que se exponen todos los días. 72 senadores tranquilamente podemos hacer el esfuerzo. No quiero que se nos tome como si tuviéramos privilegios: mientras otros se exponen, nosotros no», argumentó Marino.
En cambio, el peronista cordobés Carlos Caserio advirtió que en el Senado «se está mimetizando por un inconveniente que se generó en Diputados donde se armó un microclima de competencia que aquí no existía».
«Todos queremos sesionar de manera presencial, pero no se dan las condiciones», insistió.
La voluntad de retomar el diálogo que expresaron hoy oficialistas y opositores se produce luego del comunicado emitido ayer por el bloque de senadores y senadoras del Frente de Todos, en el que adjudicó a la bancada de Juntos por el Cambio pretender «paralizar» la actividad de la Cámara alta.
En el escrito, replicado a su vez a través de la red social Twitter por la vicepresidenta y titular del cuerpo, Cristina Fernández de Kirchner, los senadores oficialistas acusaron a sus pares de la oposición de «negarse a debatir», y, en cambio, recurrir a los juzgados «a buscar lo que no lograron conseguir en las urnas».