La Cámara alta sancionó el proyecto enviado por el Ejecutivo a la Cámara de Diputados para «restaurar la sostenibilidad de la deuda pública externa» con 65 votos positivos. El Frente de Todos contó con el aval de la oposición en una votación sin planteos ni modificaciones.
La sesión que comenzó en el inusual horario de las 10 AM y no tuvo a la vicepresidenta de la nación, Cristina Fernández de Kirchner, como conductora ya que esta en reemplazo del presidente Alberto Fernández producto de su viaje por Europa. En su lugar, condujo la sesión la presidente provisional Claudia Ledesma Abdala (Santiago del Estero).
El presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, Carlos Caserio (Córdoba- Frente de Todos), resaltó que «la ley es de orden público y tiene un plazo de vencimiento del 31 de diciembre del año 2020».
Realizó un análisis del proyecto de ley afirmando que «la renegociación es compatible si logramos mejorar los montos, los plazos, los intereses». «Sostenible significa que sea un compromiso pagable por eso este proyecto de ley servirá para asegurar la sostenibilidad de esta deuda: es un proyecto hecho en Argentina para los argentinos porque la única Argentina sostenible es una Argentina unida y soberana».
«El nuevo Gobierno afirma que Argentina tiene voluntad de pago pero también tiene que tener capacidad de pago y para eso hay que crecer, seguir reordenando la economía y sentar las bases de un modelo de desarrollo social virtuoso e inclusivo, ese es nuestro objetivo», aseguró.
El miembro informante consideró también que «una renegociación va a significar cumplir con los acreedores pero también va a significar menor sufrimiento para los argentinos». En ese sentido, resumió que «necesitamos ordenar la economía y cumplir con la responsabilidad de pago sin dejar afuera ningún argentino. Eso es necesario y urgente para lograr que Argentina se vuelva a poner de pie».
Al momento del cierre de la sesión, el jefe del bloque Justicialista, el senador por Salta, Juan Carlos Romero, resaltó que «las expresiones que se han escuchado hoy no tienen nada que ver con esta ley, ni sobre cómo resolver la deuda, sumado a mensajes de la búsqueda del culpable que sólo profundizan la grieta».
Aseguró que «hoy tenemos una acumulación de deuda histórica que no es otra cosa que déficit acumulado más pago de intereses, y eso es una bola de nieve que genera recesión, falta de crecimiento y achicamiento del producto bruto».
«En vez de enojarnos con los acreedores debemos enojarnos por nuestra propia conducta de tantos años», agregó el senador y mostró su acompañamiento con el proyecto al sostener que «el país necesita mostrar cierta coherencia en algunas políticas de Estado y resolver el tema de la deuda sin defoltear».
A su turno, el titular de la bancada de Cambiemos, el formoseño Luis Naidenoff sostuvo que «tenemos instalada esta idea de que siempre es más cómodo responsabilizar al pasado mediato e inmediato». Manifestó que «nosotros nos hacemos cargo de lo que nos tocó gestionar» y consideró que «nos endeudamos porque era peor el ajuste y tomamos deuda para financiar al Estado».
En relación al proyecto en discusión destacó que «algunos no asumen que son oficialismo y lo que el país necesita es lo que le va a brindar esta bancada del interbloque de Juntos por el Cambio que es el fuerte respaldo político que necesita el Gobierno, de la misma manera que lo acompañamos en el 2005 y en el 2010. Venimos a bancar al gobierno en esta encrucijada».
Por último, el presidente de Frente de Todos, José Mayans (Formosa) consideró que «estamos viviendo momentos muy duros en la Argentina donde el 40% de los hermanos argentinos viven en la pobreza y la indigencia, estos resultados conmueven la situación social de nuestro país».
«Estamos en emergencia y estamos en default y es nuestra realidad», resaltó el senador al sostener que «lo que pasó no es un relato porque la plata entraba por un lado y salía por el otro. Gran parte del negociado fue el Banco Central, que en un año emitió más de 200 mil millones de pesos y duplicó la base monetaria en pagarés. Así se instaló la bicicleta financiera en el país».
Por último, el formoseño aseguró que «nuestro desafío es cambiar la economía de especulación y usura en la que estamos metidos en una política de producción y trabajo», concluyó.