Qué dijeron las Autoridades de Transporte tras la exposición en Diputados
Funcionarios de alto rango del Ministerio de Transporte se hicieron presentes en la Cámara de Diputados, donde expusieron sobre las distorsiones en el reparto de los subsidios para el transporte automotor de pasajeros.
En la Sala 1 del anexo, el secretario de Gestión de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, reveló que el Consenso fiscal aprobado en 2018 con el impulso del Gobierno de Cambiemos fue el principal responsable de la crisis del sector, porque generó que en términos porcentuales los fondos destinados al Interior del país cayeran a la mitad al año siguiente.
Sin la presencia del ministro Alexis Guerrera, quien se excusó de participar con previo aviso por superposición de agendas, Giuliano llegó acompañado al Congreso por un cohorte integrado por el subsecretario de Políticas Económicas y Financieras de Transporte; Carlos Vittor, subsecretaria de Transporte Automotor, Laura Labat.
También intervinieron en el debate autoridades de COFETRA, que lamentaron las asimetrías entre los subsidios que recibe el Interior respecto del AMBA, una realidad conocida por todos los actores pero nunca solucionada más allá de parches eventuales implementados por los distintos gobiernos.
Durante su exposición, Giuliano repasó varios puntos que hacen a la discusión sobre un mejor reparto de los recursos al transporte, pero puso especial énfasis en el detalle cronológico de los hechos que perjudicaron al Interior del país en el último año del macrismo, y los esfuerzos realizados por la gestión del Frente de Todos para revertir esa situación.
«Si analizamos el sistema de compensación del transporte hacia el interior del país hay una participación del Estado nacional en lo que significa el subsidio al transporte del interior que desde el 2015 es del 32%, es lo que participa el Estado en el transporte del interior», comenzó el secretario.
Luego puntualizó que con el Consenso Fiscal 2018, que impactó en los números del 2019, «esa participación que era del 32% (interior) terminó en 16%», mientras que el 68% que recibía el AMBA pasó a ser el 84%.
«Se redujo el subsidio al interior en un 50%, esto es 2019», subrayó, y por el contrario ponderó que desde la llegada de Alberto Fernández los recursos para las provincias «se triplicaron en los dos primeros años para luego aumentarlo en un 60% de lo ya triplicado» en este 2022.
Giuliano indicó que «la segunda tarea» del ministerio «fue la devolución o traspaso a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de las 32 líneas que pertenecen a su exclusivo territorio».
Al respecto, aseguró que se está «gestionando este traspaso en un diálogo directo» con las autoridades correspondientes de la Ciudad.
Como tercer punto, destacó que la actual gestión plantea «la extensión de la tarjeta SUBE en el país como una necesidad de trazabilidad de subsidio al transporte, de transparencia y accesibilidad al ciudadano porque de esa manera el subsidio va por demanda y por persona».
«La cuarta acción fue la tarifa, algo complejo, pero la distorsión tiene que ver con el congelamiento en un tramo acompañando a los trabajadores esenciales durante pandemia», puntualizó, y señaló que ya se ha iniciado «el proceso del aumento de la tarifa» de los colectivos del AMBA como ya había adelantado dos semanas atrás el jefe de Gabinete, Juan Manzur, durante su visita al Senado.
«Estamos en el medio del camino y realmente intentando superar la distorsión que ha sido planteado por gobernadores e intendentes de todos los colores políticos que significó el Consenso Fiscal y la conexión a las 32 líneas de Buenos Aires dentro del subsidio federal directo», concluyó.
A propósito del debate abierto de cómo mejorar la distribución de los subsidios con un criterio federal, el número 2 de Transporte aclaró que cualquier reforma tiene que tener en cuenta «las particularidades propias y fisonomía de cada uno de los transportes y ciudad».
«En el AMBA el sistema de transporte, el flujo que tiene, tiene ciertas características, y en Mar del Plata es distinto por la temporalidad y la frecuencia. Tienen territorialidades distintas por la cuestión de la fisonomía de las provincias», ejemplificó, y agregó: «En el AMBA también tenemos diversidad en materia de transporte y tiene que ver con los índices que analizamos como pasajeros por kilómetros recorridos y en CABA el IPK es de 2.72 por kilómetro».
Sobre las opiniones que hablan sobre la conveniencia de eliminar los subsidios al transporte, Giuliano discrepó rotundamente.
«El transporte tiene un gran componente de subsidios en todo el mundo y está agigantado sobre todo con la pandemia. Tiene subsidio porque tiene un profundo sentido social, ambiental y de ordenamiento urbanístico», resumió.
En representación de COFETRA, su presidente Osvaldo Miatello advirtió que «el proceso de destrucción del transporte público en el interior se está dando, a pesar de que todas las jurisdicciones provinciales y municipales hemos ido aumentando la cantidad de subsidios que damos y hubo que hacer un proceso de ajuste de tarifas».
«Hoy estamos en tarifas del transporte urbano e interurbano en el orden de los 70 pesos», advirtió, y reconoció que «desde el punto de vista del pasajero de pagar una tarifa de ese costo se hace complicado«.
Miatello, quien es a su vez secretario de Transporte de Santa Fe, se quejó por el valor del gasoil y colocó ese factor junto con la insuficiente cantidad de subsidios como las razones de la crisis del transporte en el interior del país.
«El hecho de que el propio gobierno nacional haya fijado un Fondo compensador con muy buen criterio y que tuvimos una triplicación de los subsidios, que fue una bocanada de aire fresco, eso se fue amesetando», relató.
A su turno, titular de Transporte y Movilidad de La Rioja y vicepresidenta del Comité Federal, Alcira Brizuela, señaló que «el AMBA recibe 18 mil millones mensuales» en materia de subsidios, mientras que se destinan solo «3.500 millones para todo el interior del país».
En cuanto al precio del combustible, precisó que «AMBA paga 145 pesos el litro y el interior paga entre 200 y 230 pesos».
«El boleto mínimo es de 20 pesos en AMBA (en realidad es 18 pesos), el interior un promedio de 45 pesos el menor, y otros 70 o 90 pesos», añadió.
También recordó que el AMBA «tiene el boleto estudiantil subsidiado» mientras que en «el Interior lo pagan las provincias».
Brizuela expresó que «no está en las manos del Ministerio de Transporte solucionar este problema, la solución está en este Congreso», y cerró: «El impuesto al combustible lo pagamos todos, pero solo se beneficia el AMBA y eso es una gran injusticia».