El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, aseguró que todas sus previsiones cambiaron debido a la situación provocada por el coronavirus y afirmó que de la adversidad “debemos salir más fortalecidos, más solidarios y unidos”, al hablar ante la Asamblea Legislativa con quórum virtual en la que dejó inaugurado el 122 período ordinario de sesiones.
“No hay memoria de una situación sanitaria tan alarmante, que nos obliga a replantear permanentemente nuestras decisiones y planes. Todas las previsiones realizadas han cambiado por esta situación excepcional”, expresó el mandatario salteño, quien consideró que “de esta gran adversidad debemos salir más fortalecidos, más solidarios y unidos”.
Sáenz brindó hoy su primer informe del estado general de la provincia como gobernador, ante una Asamblea Legislativa con quórum virtual, ya que los diputados y senadores salteños siguieron la sesión a través de una plataforma virtual, en el marco de las restricciones impuestas para mitigar la propagación del coronavirus.
La asamblea comenzó pasadas las 10.30, con la presencia del vicegobernador y presidente natural del Senado, Antonio Marocco; el presidente de la Cámara de Diputados, Esteban Amat; y los secretarios legislativos.
En tanto, en un recinto prácticamente vacío se dispusieron pantallas a través de las cuales se podía observar la imagen de 51 diputados y 21 senadores provinciales que participaron de la asamblea de manera virtual, mientras que el senador por la Capital, Guillermo Durand Cornejo, lo hizo desde su banca.
En su mensaje, Sáenz agradeció especialmente al “personal de salud y a las fuerzas de seguridad, por el espíritu de sacrificio y la vocación de servicio que vienen demostrando”, y lo propio hizo con “la enorme mayoría de salteños que han entendido el mensaje y han respetado el aislamiento social”. 
Para Sáenz, la conciencia colectiva que “nos ha unido contra un enemigo invisible es la misma que nos permite superar grietas, abandonar intereses sectarios y combatir a los otros enemigos comunes: la pobreza, el hambre, la desocupación, la inequidad, la desesperanza”.
En este sentido, indicó que «hemos reaccionado con celeridad ante la situación de nuestros hermanos del norte”, al tiempo que agradeció al presidente Alberto Fernández y su gabinete, por “acudir con su capacidad de asistencia”.
Sobre la situación económica y financiera de Salta, explicó que se “realizaron las proyecciones económicas» pero «no hay certeza del impacto final que tendrá esta pandemia”.
“Trabajamos para estar preparados para convivir con esta dinámica, de la mejor manera posible. Nuestra provincia cerró el ejercicio 2019 con un déficit de más de $1.144 millones”, dijo, y agregó: “Estamos sin presupuesto provincial, con una caída real de recursos, atravesando una crisis por la pandemia y en emergencia sociosanitaria”.
Además, adelantó que “en este contexto cambiante, el plan provincial económico 2020 tiene como principales objetivos atender las situaciones de emergencia, brindar los servicios básicos de salud, educación y seguridad, fomentar el empleo y asistir a la población más necesitada”.
Finalmente, el mandatario contó que en el norte provincial “se relevaron más de mil desnutridos extremos y más de 10.000 en riesgo nutricional, sobre todo entre la población de la etnia wichí, con condiciones de alta vulnerabilidad y dificultad de acceso al agua segura”.