La presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, y la presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner, reciben al presidente de la Nación, Alberto Fernández, en el Congreso de la Nación para la inauguración del período 141° de Sesiones Ordinarias. Mientras que la oposición se prepara para un discurso presidencial confrontativo y los legisladores del PRO amenazaron con levantarse de sus bancas como la última vez, si el mandatario los apunta en su mensaje.
Hasta último momento rondaron las dudas en el Congreso, pero finalmente, la noche del lunes salió la invitación a los miembros de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, para que participen, como es tradición, de la apertura de sesiones.
Asimismo, desde el Palacio de Tribunales, y “a pesar de lo tardío de la invitación”, indicaron que irán Rosatti y Rosenkrantz en representación de los cuatros miembros del máximo tribunal a escuchar las palabras de Alberto Fernández.
Cabe recordar que el 1 de marzo del año pasado, el Frente de Todos estaba atravesando una fuerte interna que tenía como protagonistas a Alberto Fernández y a la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en la previa del acuerdo con el FMI, mientras que el enfrentamiento con Juntos por el Cambio se mantenía en los niveles habituales. En aquel acto, los legisladores de la oposición pusieron sobre sus bancas la bandera de Ucrania, dado que la invasión rusa había comenzado una semana antes y acusaban al Presidente de no haberla condenado.
Para la jornada de este miércoles se espera que Alberto Fernández lance nuevos dardos contra la oposición a la que acusa de ser la impulsora del “desánimo” en la Argentina.
Por otra parte, con ayuda de aliados y bloques independientes, el Frente de Todos logró conseguir el quórum ayer martes para tener la primera y única sesión del período de extraordinarias y tratar la moratoria previsional. Desde la bancada oficialista dan por descontado que los choques se repetirán este miércoles durante la Asamblea Legislativa. En tanto, en la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica, los otros dos partidos que integran Juntos por el Cambio, adelantaron una postura más sobria que la de sus socios del PRO.