La ley de Emergencia Territorial de las Comunidades Indígenas, que vence en noviembre próximo, establece la necesidad de realizar un relevamiento que aún no fue concluido.
La senadora nacional Nora Giménez ingresó días atrás en el Senado de la Nación un proyecto de prórroga hasta el año 2025 de la vigencia de la ley nacional 26.160, que declaró la Emergencia Territorial de las Comunidades Indígenas, y cuyo vencimiento se producirá en noviembre próximo.
Esa ley, aprobada en 2006, permitió frenar el desalojo y expulsión de sus tierras de decenas de comunidades originarias en diferentes puntos del país. Estuvo inspirada en el artículo 75 inciso 17 de la Constitución Nacional, que no sólo reconoce la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas, sino también la posesión y propiedad comunitaria de las tierras que ocupan.
En este sentido la senadora recordó que la ley 26.160 ordenaba además la realización de un Relevamiento Territorial de las Comunidades Originarias, “en el espíritu de dar una solución definitiva a los conflictos de tierras que se repetían en varias provincias, para encaminarlos hacia una regularización dominial con la entrega de los correspondientes títulos comunitarios”.
En el tiempo transcurrido, el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) pudo relevar sólo 742 de las 950 comunidades identificadas en 2006. Y a ese número se han agregado otras, en su mayoría desmembramientos de grupos existentes, que ampliaron a cerca de 1.000 el número de comunidades a relevar. Por ello el proyecto de la senadora Giménez extiende hasta 2025 la vigencia de la ley para poder completar el Relevamiento Territorial, y establece una partida presupuestaria especial para concluir esa tarea.
Cabe destacar que el texto del proyecto de prórroga fue consensuado con la actual titular del INAI, Magdalena Odarda, con quien la senadora se reunió en reiteradas oportunidades.
Además, los fondos solicitados en la iniciativa fueron estimados por los técnicos de ese organismo, en función de poder cumplir con el Relevamiento Territorial.
La legisladora destacó finalmente que, pese a los avances logrados para atender la agenda de los pueblos originarios, aún hay una importante tarea pendiente. “Hoy se pueden escuchar las voces de la identidad indígena en varios sectores de la sociedad, y este avance es por un cambio de mentalidad producido por estas políticas de inclusión y de cambio cultural impulsadas desde el 2003”, concluyó.