La Diputada Nacional por el Bloque FPV por Río Negro Maria Emilia Soria se dirigió al gobernador de dicha provincia Alberto Weretilneck, luego de sus declaraciones «anunciando el panorama terminal de la situación financiera de la provincia».
Señor gobernador:
Somos muchos los rionegrinos que al escuchar su mensaje de ayer anunciando el panorama terminal de la situación financiera de la provincia nos quedamos asombrados por la soltura con la que Ud. hecha culpas a la caída de la actividad económica general o a la disminución de aportes por parte del gobierno nacional, sin hacer el más mínimo atisbo de análisis sobre su propia responsabilidad en este desastre.
Es por ello que en esta misiva me propongo ayudarlo a Ud. a revisar los verdaderos motivos por los cuales el gobierno provincial se encuentra desfinanciado y los rionegrinos endeudados. Tal vez así pueda Ud. dejar de cometer una y otra vez los mismos errores que durante tanto tiempo han sumido a nuestra hermosa y rica provincia en un estado de abandono y olvido que solo aparenta florecer en años electorales.
En primer término le recuerdo que Ud. no es un mero espectador de lo que está sucediendo, sino que con cada una de las decisiones que ha tomado en sus dos gestiones como Gobernador de Río Negro, es el principal responsable del devenir de nuestra provincia. En esta función ha dispuesto Ud.- y nadie más que Ud. – entregar $50.000.000 en aportes no reintegrables a instituciones y personas jurídicas que “casualmente” aparecieron durante su campaña para renovar la gobernación. También fue Ud. quien decidió la compra de un Audi A7 por más de $3.000.000, primordial para poder trasladarse desde su casa a la gobernación, ya que para salir de Viedma sólo utiliza Ud., su familia y sus funcionarios aviones privados por los que todos los rionegrinos pagamos al año más de $6.000.000. También fue Ud. quien efectuó contrataciones por montos exorbitantes en publicidades que nunca se emitieron. También fue Ud. quien emprendió un costoso viaje de estudios o de luna de miel o lo que haya sido, a Italia acompañado por una nutrida comitiva y que supuestamente serviría para traer las soluciones a los problemas de nuestra fruticultura (seguimos esperando resultados). La lista de negligencias de este tipo es muy larga y sobre todos los hechos se han realizado pedidos de informes o han sido denunciados penalmente por legisladores y diputados del FpV. Dado que el objetivo de esta carta abierta no es consternar a los vecinos que la leen, no voy a extenderme más en este punto que Ud. ya bien conoce.
En el plano de la defensa de los derechos de los rionegrinos ante el Gobierno de la Nación, su rol ha sido más bien inverso: si en lugar de querer consagrarse con Macri sumiendose en un silencio cómplice hubiese llevado adelante un férreo reclamo de la recursos coparticipables que nos corresponden, hoy los rionegrinos gozaríamos de una economía más solvente. Desde el inicio de mi labor como diputada le advertí cada embestida del gobierno nacional contra nuestros derechos sobre la coparticipación, pero Ud. siempre las celebró en lugar de al menos intentar impedirlas.
Algo similar ocurre en cuanto a la económica regional, al decidir asumir el rol de “socio del Gobierno Nacional” en vez de defender los intereses de los rionegrinos, Ud. permitió que la crisis frutícola se agravara en vez de recuperar la actividad oportunamente. Ud. permitió también los aumentos en los servicios básicos y en los combustibles que hoy perjudican al turismo y a miles de rionegrinos que ven afectada su calidad de vida.
Si Ud. no puede pagar sueldos, el problema no es de los trabajadores estatales. Existe un responsable de haber duplicado la planta de empleados públicos innecesariamente y de haber permitido el aumento ilimitado de los megasueldos de su creciente flota de funcionarios.
A Ud. señor gobernador que acostumbra jactarse de actitudes maduras y serias en la defensa de la institucionalidad, los rionegrinos que estamos cansados que nos tomen el pelo le pedimos que predique con el el ejemplo y asuma la responsabilidad que le corresponde y el mandato que le confirió el pueblo rionegrino. Si dejara de dilapidar recursos y gobernar para su propio beneficio, seguramente a los rionegrinos nos iría mucho mejor.
Atte.