«Soy peruca y hablamos clarito» dijo CFK, pero… ¿Qué es ser «peruca»?
“Soy peruca y hablamos clarito. El único renunciamiento que tuvo el peronismo fue el de Eva” sostuvo la vicepresidenta Cristina Fernández en su discurso en la tarde noche del ayer martes 27/12.
Entre otras de las frases que quedó para el análisis, ésta contiene un singular término que puede sonar “novedoso” en los oídos de los más jóvenes y la pregunta surge casi instantáneamente: ¿Qué es ser “peruca”?.
“Soy peruca y hablamos clarito”
— Sergio Chouza (@SergioChouza) December 27, 2022
Bueno pues, el termino surge del “vasto” diccionario peyorativo de la argentina: “Perucas son los peruanos como así también aparecen los paraguas que son paraguayos y bolitas los bolivianos, especialmente llamados así en fábricas, obras en construcción y también desde algún escritorio”.
En épocas del auge del Peronismo (donde el movimiento comenzaba a desafiar estructuras muy arraigadas en el establishment), desde la vereda contraria, desde ese lado de la grieta que aun subyace en nuestros tiempos, existieron varios términos peyorativos para nombrarlo.
En este sentido “peronato” fue una de las maneras de definir ese fenómeno desde la oposición. También el vocablo “peruca” o “peronacho” –de uso actual- representa la forma descalificatoria del simpatizante peronista.
Con el paso del tiempo, a modo de bandera, el propio movimiento tomó esos términos despectivos y los convirtió en propios. Se adueñó de los mismos. Una forma de establecer que el término (lejos de herir susceptibilidades) enorgullece, habla de un sentido de pertenencia (algo así como los hinchas de Boca adoptando para siempre y como propio el “Bostero”).
Pero acaso “Peruca” no es el único: peronios, piruchos, cabecitas, grasitas, descamisados, compañeros y compañeras…si algo sobra en el Peronismo son las formas de llamarlos.
“Soy Peruca y hablamos clarito” dijo CFK y era de Peronismo de lo que hablaba.