En el hotel Savoy, la precandidata a senadora Margarita Stolbizer encabezó una jornada de diálogo sobre Puentes entre Educaciòn y Trabajo: el gran desafío. Organizado por la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC) y la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES) participaron también el economista Matías Tombolini, el especialista en educación Gustavo Iaies y la Diputada Nacional y dirigente gremial Carla Pitiot.
Stolbizer arrancó el encuentro señalando que «en esta campaña electoral los otros espacios políticos se resisten a discutir lo importante: propuestas. Hay una exagerada crispación por tratarse de elección de medio término para una renovación parcial del Congreso en la que se elegirá la mejor oposición para acompañar al gobierno pero también para controlarlo».
«Esta tarde proponemos hablar sobre la necesidad de tender puentes y no muros o grietas. Puentes entre la educación y el trabajo Entender la educación como el camino hacia el progreso. El estado como puente para equilibrar las relaciones desiguales y desde el presente proyectarnos hacia el futuro. Para ello hay que prepararnos como sociedad frente al impacto de la tecnología. La educación tiene que garantizar empleabilidad».
Por su parte Iaies planteó que muchas veces se habla de conectar la secundaria con el mundo del trabajo, cuando la mitad de los pibes en realidad no llega a terminar ese nivel educativo. También dijo que el programa hoy de secundaria hace zapping por diversos temas, más para que todos sepan poquito de todo y no sirve demasiado. Hay que prepararse para que puedan pensar. Reaprender. Tener un ordenamiento y certidumbre respecto del mundo y su funcionamiento .
Pitiot se refirió a la educación como acceso no solo al trabajo sino a más derechos. Hoy los chicos de diferentes clases sociales no acceden a la misma educación y esa desigualdad genera que unos tengan mas derechos que otros.
Tombolini señaló que lo que no hay en esta campaña es debate de ideas. El gobierno no propone a los argentinos discutir sobre ninguna propuesta. Hay dos argentinas. El desafío de la revolución educativa tiene que entender esta diferencia para lograr resolverla. Hay chicos con problemas de malnutrición y de pobreza estructural. Esos chicos llegan distinto a la educación que aquellos que recibieron buena alimentación y mejores condiciones de vida. Además de pensar estrategias para alcanzar más equilibrio entre estas dos argentinas también dijo que la educación debe enfocarse en que los chicos tengan más curiosidad,más preguntas que respuestas.