La estación Congreso de la línea A del subte porteño llevará también la denominación «Presidente Dr. Raúl Ricardo Alfonsín» en homenaje al exmandatario argentino, según la norma aprobada este jueves por la Legislatura de la Ciudad.
El proyecto busca recordar al líder radical «en conmemoración del décimo aniversario de su fallecimiento» en el lugar donde desempeñó su último cargo público como senador nacional.
Ariel Álvarez Palma (Vamos Juntos) sostuvo que se trata de «un homenaje merecido y justo», y recordó al expresidente recitando el preámbulo de la Constitución Nacional, tal como hacía el propio Alfonsín durante la campaña presidencial de 1983.
El aporte del dirigente radical durante los años de la dictadura con la presentación de habeas corpus en favor de detenidos, su rechazo a la guerra de Malvinas y a la ley de «autoanmistía», la consolidación democrática y el Juicio a la Juntas, fueron actos destacados por quienes acompañaron la iniciativa.
Sin embargo, el debate fue acalorado por las críticas lanzadas por los representantes de la izquierda, quienes cargaron contra el ex presidente por su política económica, sus acuerdos políticos con el menemismo y por las llamadas «leyes de la impunidad».
Myriam Bregman (PTS-FIT) argumentó su rechazo a la iniciativa en la sanción de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida impulsadas luego de los levantamientos militares de la década de los ‘80 y que significaron, en la práctica, el fin de los juicios contra militares acusados por crímenes de lesa humanidad.
Esas intervenciones fueron respondidas por Juan Nosiglia (Evolución) y Leandro Santoro (Unidad Ciudadana), quienes señalaron que las acciones tomadas por Alfonsín significaron la ruptura final con las intervenciones militares en la vida democrática.
Santoro, de origen radical, reprendió a sus pares de la izquierda al achacarles que «es fácil hablar hoy» sobre cómo se debía reaccionar contra los militares, y les recordó que a mediados de los años 80 los generales aún estaban «al frente de comando con poder de fuego».
«Era consciente que era frágil, que era una democracia perfectible. Pero también decía que quien no entendía la diferencia entre la democracia y la dictadura no entendía la diferencia entre la vida y la muerte», concluyó Santoro.
Hasta llegar a la sanción definitiva de hoy, el proyecto fue tratado con anterioridad en comisión, aprobado en primera instancia en el recinto y pasó por una audiencia pública destinada a que la ciudadanía expresara su opinión.
En ese encuentro, que se realizó los primeros días de marzo, un grupo de dirigentes radicales respaldó la propuesta.
Entre ellos, el exintendente de la Capital Federal, Facundo Suárez Lastra, señaló que se trata de «un homenaje justo y prudente» al expresidente, y destacó que Alfonsín «protagonizó jornadas históricas en el Congreso».
En la sesión también se homenajeó a otro ex presidente radical, el recientemente fallecido Fernando de la Rúa, con una manifestación de «profundo pesar» votada por el oficialismo y por el bloque de Evolución.